Javi Lara, durante el partido UD Ibiza-UCAM Murcia. | Roberto Palomo

La Segunda División no es una categoría sencilla nunca para un recién ascendido. Menos aún se le presenta a la UD Ibiza tras el sorteo realizado ayer en la sede de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) en Las Rozas, puesto que le tocará medirse a colosos del fútbol nacional como el Zaragoza y el Málaga en el arranque.

Los celestes debutarán el fin de semana del 14 y 15 de agosto contra los maños en La Romareda, el estadio de mayor capacidad de la categoría de plata, con capacidad para 33.608 espectadores. El primer partido como local está previsto para la semana posterior contra el Málaga, otro clásico del fútbol nacional. Si Can Misses no está listo, se jugará en otro de los únicos cinco recintos que superan las 30.000 personas de aforo.

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Por si no fuera suficiente, la siguiente salida del conjunto que dirige Juan Carlos Carcedo será al feudo de una escuadra que hace dos temporadas militaba en Primera División: el Leganés. Tras tres duelos de altura, el Amorebieta, otro recién ascendido, se presenta como el primer rival de ‘su’ liga en un choque que se celebrará el 4 o 5 de septiembre en la isla.

Cabe recordar que el estadio de Can Misses se encuentra actualmente en obras para cumplir con los requisitos exigidos para competir en el fútbol profesional. En caso de que no se terminaran a tiempo para el choque del 14 o 15 de agosto, los unionistas lo disputarían en el campo de su rival, pasando a disputarse la vuelta en Can Misses. Esta situación puede producirse durante los tres primeros partidos.

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