Mateo Sanz, en los pasados Juegos Olímpicos. | OLIVIER HOSLET

Mateo Sanz ha dicho basta. El formenterense ha decidido poner fin a su carrera deportiva por el dolor que sufre en la espalda.

«Probablemente, este fin de semana hice mi última carrera. Fue lindo despedirme navegando por mi isla, Formentera. Es hora de darle un poco de descanso a la zona lumbar. Una decisión difícil, pero lo que siempre disfruté empieza a ser doloroso», afirmó el windsurfista.

El formenterense puede presumir de haber ido a dos Juegos Olímpicos y ser, por tanto, el único deportista pitiuso que ha tenido ese privilegio. Además, en los recientes Juegos de Tokio, celebrados este verano, consiguió el primer diploma olímpico para Formentera y las Pitiusas, poco antes de que Marc Tur lograra el segundo y primero para Ibiza. Además, fue subcampeón mundial y número uno del ranking mundial.