El español Marc Tur (i) compite en la prueba 35km marcha masculina hoy, en los Campeonatos Mundiales de Atletismo en Eugene (EE.UU.) | Kai Forsterling

Marc Tur no pudo cruzar la meta en la prueba de los 35 kilómetros marcha de los Campeonatos del Mundo de atletismo, que se están celebrando en Eugene (Estados Unidos). El ibicenco fue descalificado cuando quedaban aproximadamente 10 kilómetros por delante.

El de la Peña Deportiva de Santa Eulària anduvo lejos de los puestos de podio durante toda la carrera, en la que se imprimió un ritmo muy alto desde el principio que no le beneficiaba lo más mínimo. El japonés Daisuke Matsunaga se escapó en solitario en el arranque y con el paso de los kilómetros se crearon dos grupos perseguidores. El pitiuso formaba parte del segundo. Poco a poco, fue remontando posiciones, situándose entre los 20 mejores, pero la descalificación le privó de pelear por su objetivo: acceder al top ten.

El italiano Massimo Stano, campeón olímpico de los 20 kilómetros marcha, se erigió en el primer campeón mundial de los 35 kilómetros con una sucesión de ataques que terminaron por doblegar, con un tiempo de 2h23’14’’, mejor marca mundial de la historia, al japonés Masatora Kawano, que se arrojó sobre la raya para cruzar sólo un segundo después. El sueco Perseus Karlstrom ganó al ecuatoriano Brian Pintado la batalla por la medalla de bronce.

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Marc Tur, como es habitual en él, lució su mejor sonrisa para recordar que esto no ha hecho más que empezar y ya tiene la mirada puesta en el Europeo de Munich. «Ahora ya hay que ir para arriba. Toca seguir trabajando la técnica. Me tomo esto como un aprendizaje y hay que ver los puntos débiles que tengo que mejorar».

De la prueba destacó el alto rimo: «Desde el principio se ha visto que era una carrera muy rápida. Han salido para hacer récord del mundo, una burrada, a casi ritmo de 20. Yo me he encontrado bastante bien. Llevaba la estrategia de ir de menos a más. Al principio iba muy atrás. Poco a poco fui recortando segundos a los de delante. Las medallas estaban lejísimos, pero sí que tenía ganas de luchar por el top ten. Esa era mi intención, pero la marcha es así. Me han sacado cuatro tarjetas y me he visto fuera de poder luchar por cualquier cosa».

El ibicenco apuntó que esta distancia «es un 20 con 15 kilómetros más». «Han acabado a ritmo de 20 kilómetros. El japonés salió como una bala. Es un ritmo muy exigente. Los primeros clasificados eran ‘veinteros’. Ha ganado el campeón olímpico de los 20 kilómetros», expuso.