Lina Martínez, presidenta del CB Pitiús.

Lina Martínez Torres (Ibiza, 18-05-196) es una de las principales impulsoras del bádminton ibicenco. Desde que su hijo Vicent Martínez empezase a practicar este deporte hace casi tres décadas, ella se involucró de manera directa, ayudando al enorme crecimiento que ha tenido el este deporte en la isla. Empezó hace 25 años como miembro de la junta directiva del Club Bádminton Ibiza. Posteriormente se creó el Club Bádminton Pitiús, del cual ella es la presidenta desde hace 15 años, impulsando durante esta etapa, la creación hace 10 años de la Apymbad (Asociación de Padres y Madres de Bádminton). También ocupa el cargo de Secretaria de la Federación Balear de Bádminton desde hace ocho años.

— Lleva muchos años metida en el mundo del bádminton ibicenco. ¿Cómo ha ido evolucionando desde que empezó?
— La verdad es que tres décadas dan para mucho, nunca hubiera imaginado allá en el 95 que el bádminton tendría un papel trascendente en mi vida, pero claro, con mis dos hijos metidos de lleno y a mí que siempre me ha gustado aportar se hizo inevitable. La evolución del bádminton en general salta a la vista. Empezamos siendo un deporte minoritario y desconocido y en cuestión de años hemos logrado hacer historia con los éxitos de Carolina Marín, los cuales hemos podido vivir muy de cerca con ella entre las filas del Pitiús. Además, el deporte ibicenco está en auge, se está haciendo un trabajo excepcional por parte de nuestros técnicos, que sumado al apoyo de las instituciones nos permite seguir creciendo.

— No sé si en algún momento se habían llegado a plantear la realidad actual en la que Ibiza es una de las mayores canteras españolas. Sólo hay que ver los resultados en cada campeonato nacional.
— El Bádminton Ibiza siempre ha sido un referente a nivel nacional. En menor cantidad, pero siempre ha habido medallistas en Campeonatos de España entre nuestros deportistas. Sin embargo, la realidad actual era impensable. Hoy por hoy, el 90% de nuestros deportistas son medallistas en campeonatos de España, el 50% son Campeones de España y un gran número de ellos representan a España en con la selección. Hemos pasado de uno a seis clubs en muy poco tiempo, Escuelas Municipales en todos los municipios de la isla, distintos grupos de tecnificación con más de 50 deportistas compitiendo a nivel nacional…

— ¿Cuáles son las claves de este éxito?
— Esta pregunta creo que le correspondería a los artífices de todo esto: Ernesto, Vicent y Silvia. El resto de personas sólo les ayudamos y apoyamos en lo que podemos. Pero desde mi punto de vista, el secreto es la pasión y la dedicación que le ponen diariamente a los entrenamientos. Festivos, olas de calor, encaje de bolillos en diferentes pabellones y un largo etc que no impide a nuestros técnicos trabajar muy duro diariamente. Son personas que aman lo que hacen y le dedican muchísimo tiempo a este proyecto, el cual tiene cada año objetivos más ambiciosos.

— ¿Qué papel tiene la asociación de padres y madres?
— La Apymbad es solo un granito de arena para que nuestra estructura sea sostenible en el tiempo. Las madres y padres de hoy en día, al igual que me pasó a mí cuando mi hijo se inició en este deporte, ven a sus hijos felices, en un ambiente sano y con personas que les transmiten diariamente valores que les servirán para muchas otras facetas de su vida. Hace unos años surgió la idea de crear una asociación que pudiera ‘liberar’ a nuestros técnicos de mucho trabajo sucio que les quitaba tiempo en pista y empezamos a encargarnos de aspectos como la organización de eventos, búsqueda de patrocinadores, lotería, etc. Es la manera de agradecer y aportar en un proyecto en el que nuestros hijos e hijas tienen depositada mucha ilusión, por lo que nuestro esfuerzo vale la pena.

— No puedo dejar de preguntarle por el Pitiús que regresa a la máxima categoría. ¿Qué objetivo tienen?
— El Pitiús es, por así decirlo, nuestro máximo exponente o escaparate, aunque el bádminton sea un deporte individual, a la gente le gusta mucho la Liga de clubes y a los propios deportistas también. Con el objetivo tratamos de ser siempre precavidos, pues los recursos son los que son y nuestra prioridad siempre ha sido cuidar la estructura. El mercado de fichajes es cada vez más competitivo y no podemos dejarnos llevar por el mero hecho de querer ganar, preferimos seguir formando a nuestros deportistas e intentar que sean ellos los titulares del equipo.

— Entonces seguirán los más jóvenes teniendo un papel principal. ¿No habrá fichajes?
— Como comentaba, nuestra premisa es jugar siempre con los de casa, pero es cierto que por la complejidad de la Liga Nacional hay que reforzar los equipos con algunos fichajes por lo que pueda pasar.

— A nivel mediático quizás la mayor pena de los últimos años es que no hubiese podido jugar Carolina Marín en la isla.
— Sí, esa espinita se nos quedó a todos, tuvimos la suerte de disfrutar de ella en un encuentro de liga que no se jugó en casa, pero por causas ajenas a su voluntad no pudo estar presente en las fechas previstas para jugar en Ibiza. Carolina sigue mantenido una especial relación con el Bádminton Ibiza y ojalá podamos volver a contar con ella en algún momento de su carrera. Ahora solo podemos desearle mucha suerte en su preparación a París donde seguro que nos vuelve a dar una nueva alegría.

— Volviendo a lo que es el bádminton ibicenco en general, parece que el futuro está asegurado.
— El bádminton ibicenco goza de muy buena salud, pero no debemos bajar la guardia. Somos muchas las personas trabajando para que estos éxitos y el auge de nuestro deporte sean cíclicos y estables en el tiempo. De lo cual no tengo duda, tenemos un equipo humano excepcional.