Daniel Bernárdez se revuelve para lanzar ante tres defensores del Barça Atlètic. | Moisés Copa

El Trasmapi UD Ibiza HC Eivissa ha perdido este sábado una nueva oportunidad. Los ibicencos han caído ante el Barcelona B (28-31) víctima de sus propios errores. Demasiadas pérdidas y poco acierto en lanzamientos claros, incluida una sangría desde los siete metros hicieron, imposible que las buenas acciones defensivas y de la portería se viesen reflejadas en el marcador.

Los celestes salieron bien a la pista y con dos buenos ataques y una mejor defensa se pusieron 2-0 en el marcador. Una exclusión de Samu Pereiro permitió a los visitantes igualar la contienda justo cuando se cumplía el minuto cinco (2-2).

Los árbitros señalaron pasos en tres acciones consecutivas de los ibicencos y eso hizo que los visitantes consiguiesen su primera ventaja del partido. El juego tenía mucho ritmo, pero también demasiadas imprecisiones y el marcador se movía poco. Zarzuela dio una pequeña ventaja a los pitiusos cuando vio los dos minutos y protestó con insistencia, algo que se convirtió en dos minutos adicionales. Tenían cuatro en superioridad los locales. Así, el partido pasó del 3-4 al 7-5.

Eso sí, el Barça B no tardó en volver a igualar la contienda. Pasaban los minutos y eran los ibicencos los que llevaban la iniciativa. Ventaja de uno o dos goles y vuelta al empate. Ese era el paisaje, pero se rompió justo antes del descanso, marchándose los visitantes por delante (14-15).

La segunda parte empezó con parada de Forns y gol de Pereiro. Otra parada permitía a Zungri volver a dar la ventaja a los locales (16-15). Forns volvía a parar. Pero una pérdida en la circulación ya hizo que el portero celeste se viese superado (16-16). También estaba muy inspirado el portero visitante en estos primeros minutos de la segunda parte.

El ecuador de este segundo acto se cruzó con el 20-22 en el marcador y la siguiente acción llegaba la máxima ventaja de los visitantes. Tenía que mejorar el conjunto ibicenco si no quería que se le escapase el partido antes de tiempo.

Sin capacidad de reacción

Con esos tres tantos de diferencia (22-25) se entró en los últimos 10 minutos. Los de Eugenio Tilves no eran capaces de hacer daño a la defensa visitante y a falta de cinco minutos y medio y con el 24-28 en el marcador pidió tiempo muerto en busca de un último ajuste que obrase la remontada. No fue posible y se confirmó una nueva derrota de los ibicencos (28-31). Se escapa una de las últimas oportunidades. Fallando cinco siete metros es complicado. Quedan cinco partidos.