Una acción del partido del domingo entre el Atlético Baleares y la UD Ibiza. | Miquel Payeras

La afición celeste vuelve a sonreír. La UD Ibiza parece haber dejado atrás su crisis y las aguas van volviendo a su cauce. El juego no ha sido espectacular, pero los resultados sí han sido los deseados. Dos victorias consecutivas, la última a domicilio en el derbi balear, para enterrar la racha de ocho jornadas sin ganar.

El fútbol es un estado de ánimo. Esta frase atribuida a Jorge Valdano tiene mucho de verdad y sirve tanto para los jugadores como para el aficionado. En las gradas, hace poco más de dos meses se hablaba de ascenso directo. Luego, llegó ese gran bache de resultados y la preocupación estaba en si el equipo conseguiría defender el playoff. Ahora, hay algunos que vuelven a hablar de que aunque el Castellón tiene nueve puntos de ventaja, con 18 por disputarse, todavía es posible alcanzarles. Una montaña rusa de emociones en la que la ilusión vuelve a aparecer.

Melilla y Atlético Baleares son dos equipos de la zona de descenso, pero también los eran otros que se atragantaron. Lo importante para los celestes era salir de esa espiral negativa y lo han hecho. Esta semana regresarán a Can Misses para buscar ante el Atlético de Madrid B, un equipo que empieza a estar en tierra de nadie, la tercera victoria consecutiva.

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Es cierto que en los últimos partidos en casa, más allá del resultado, el conjunto de Guillermo Fernández Romo ha tenido un caudal ofensivo importante, con muchas llegadas y menos acierto. Incluso los cuatro goles contra el Melilla podrían haber sido más si el equipo hubiese estado fino. El problema está siendo que el equipo ha perdido en cierta medida aquella solidez defensiva que tenía en la primera vuelta y es vital recuperarla, para este final de liga y un más que posible playoff.
Esta fortaleza, que fue una de las señas de identidad celeste todavía es palpable, ya que aunque se atravesó una racha de ocho jornadas sin ganar, el equipo sigue siendo el segundo menos goleado con 27. Sólo el Málaga, con 21, encaja menos. También los números ofensivos se han visto resentidos, pero siguen siendo correctos y, con 52 dianas, la UD Ibiza es el tercer equipo más prolifero.
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Más allá de todo esto, el paso del tiempo es inevitable y ya sólo quedan seis jornadas por disputarse. 18 puntos antes del playoff. La primera parada, es la ya mencionada en casa ante el Atlético de Madrid B. Después, el equipo viajará a Antequera para medirse a una de las revelaciones de la temporada, que todavía apura sus remotas opciones de meterse en playoff.

El siguiente en visitar Can Misses será el Real Madrid Castilla que empieza a estar en una situación muy delicada, con sólo tres puntos por encima del descenso. Habrá que ver cómo llegará a la isla pues en dos jornadas se puede despejar bastante el panorama o apretarse mucho más.

Todo esto antes de la traca final. Si los celestes consiguieran sacar estos nueve puntos, quizás llegarían con la posibilidad de meterle el miedo en el cuerpo al Castellón, si este fallase en alguno de sus partidos. Viaje a Castalia y, a continuación, recibir al Córdoba, en lo que podría ser un duelo por la segunda posición. Aunque todas estas cuentas pueden cambiar en cualquier momento. El cierre de liga será en Huelva ante el Recreativo, un equipo que espera llegar a ese fecha con opciones de meterse en el playoff.