Según ha informado este miércoles la Policía en un comunicado, los hechos ocurrieron sobre las 19.00 horas del pasado sábado, cuando recibieron una llamada alertando sobre una agresión en un recinto deportivo.
Al llegar al lugar, los agentes fueron requeridos por un jugador del equipo local, quien informó de la agresión que había sufrido su compañero, que estaba inconsciente en el césped. Los policías solicitaron de inmediato una ambulancia medicalizada, que llegó al lugar pocos minutos después y se hizo cargo del herido.
El presunto agresor, un español de 20 años, se presentó ante los policías poco después y ofreció su versión de los hechos. Según contó, tras una falta que provocó su expulsión del partido, un jugador del equipo contrario le hizo un comentario provocativo y él respondió propinándole un cabezazo.
Por su parte, la víctima manifestó que, tras sufrir una falta por parte del rival, y sin mediar palabra, éste le pegó un cabezazo en el rostro que le hizo perder el conocimiento por unos instantes y le provocó una importante hemorragia.
La versión que ofreció el herido fue corroborada por algunos testigos, incluido el árbitro, aunque éste último solo vio la agresión y no los momentos previos.
El agredido fue evacuado a un centro hospitalario por la gravedad de las heridas y un día después presentó denuncia. Los agentes determinaron que la agresión fue una acción violenta no relacionada con el juego y procedieron a detener al joven de 20 años.
Finalizadas las diligencias urgentes de prevención el atestado y detenido fueron traspasados a la Policía Nacional.
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