Las relaciones entre Bauzá y Company han acabado a cero y con desprecio mutuo.

José Ramón Bauzá formalizó ayer su marcha del PP y su renuncia como senador, tal y como había anunciado el miércoles de la semana pasada. No asistió en persona. Entregó los documentos su secretario parlamentario, Alejandro Sanz.

Sanz se presentó ayer en la sede del partido poco después de las diez de la mañana y presentó el escrito en recepción, sin preocuparse por visitar ningún despacho. Poco después, recorrió a pie los apenas cincuenta metros que separan la sede ‘popular’ de la entrada del Parlament y presentó el documento de renuncia de Bauzá como senador autonómico. En el escrito, Bauzá afirma que «letrados de la Cámara» le han asesorado que es mejor formular la renuncia en el Parlament Balear, ya que es esta institución la que le ha nombrado senador.

«Capítulo del pasado»

El actual president del PP balear, Biel Company, comentó ayer por la mañana que la marcha de Bauzá «ya es un capítulo del pasado» y que su objetivo actual «es ganarlas elecciones del 26-M».

La marcha del expresident fue anunciada el pasado miércoles, aunque no la formalizó hasta ayer, desatando desazón e impaciencia en la sede del PP ya que pasaban los días y Bauzá no aparecía. Como se sabe, hizo pública su marcha entre duras críticas hacia el actual PP balear por su defensa del catalán (se refirió incluso al Estatut) y por sus veleidades nacionalistas.

Company se mostró distante de Bauzá y no le respondió de forma directa. Rechazó las «justificaciones y excusas falsas» formuladas por el expresident para abandonar el partido. E insistió: «Del pasado no hablo, sólo del presente y del futuro». También indicó que «no hay que perder más tiempo con su decisión».

Explicó que «nos pondremos en marcha sin prisa pero sin pausa» para designar a su sucesor en el Senado. Company dijo que «de momento no hay ningún nombre sobre la mesa». Había hablado del tema con Pablo Casado y aseguró «no haber problemas».