Según ha informado el presidente de la Felib, Antoni Salas, en una nota de prensa, concretamente lo que se ha pedido es «flexibilizar las reglas fiscales de estabilidad presupuestaria y el techo de gasto que permitirían a los ayuntamientos disponer de más de 600 millones de euros que se estima están parados en los bancos».
«Tenemos dinero para afrontar esta crisis y para ayudar a nuestros vecinos, los ayuntamientos son la entidad más próxima al ciudadano, su papel en estos momentos es esencial», ha explicado al respecto y, ha añadido, «tenemos las herramientas, queremos que nos las dejen utilizar».
Asimismo, la Felib ha pedido en su escrito que elimine el límite máximo de 300 millones «que tendría que ser el mínimo», del que disponen el conjunto de las entidades locales para financiar ayudas económicas y prestaciones de servicios sociales.
«Hemos pedido al presidente que no se coarte el autonomía local y que los remanentes de los ayuntamientos se queden para los ciudadanosde estos municipios», ha añadido el representante de los consistorios de Baleares.
Con todo, se trata de un mensaje que ha sido remitido de forma paralela al presidente de la Federación Estatal de Municipios, Abel Caballero, a quien se ha agradecido su papel «fundamental» para lograr las flexibilizaciones que existen actualmente. Si bien, se le ha animado a que no se quede ahí y brinde su ayuda en esta lucha.
«Hemos de flexibilizar el régimen de contratación de corporaciones locales para sumar a personas capaces de impulsar aquellos proyectos de asistencia a los vulnerables, reparar el tejido empresarial y la economía local», ha reivindicado Salas. «Solo las entidades locales son conocedoras de la realidad de sus municipios», ha concluido.
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