Reunión de activación de la asamblea. | Jaume Morey

Baleares será en 2022 la primera comunidad que celebrará una asamblea ciudadana por el clima, entendida como una iniciativa para el debate social sobre el impacto de la crisis climática, potenciar la participación y encontrar soluciones conjuntas para mitigar sus efectos en las Islas. Así lo anunció ayer la presidenta del Govern, Francina Armengol, tras una reunión en este sentido con otros representantes del Ejecutivo autonómico, de los consells insulars y del Laboratori Interdisciplinari sobre Canvi Climàtic (Lincc) de la UIB.

Precisamente, la iniciativa surge del Lincc y será la primera en el ámbito autonómico, pues ya está en marcha una asamblea a nivel estatal. La asamblea balear será complementaria a la estatal. Armengol destacó la importancia de la asamblea «porque permitirá hacer pedagogía y promover la participación y el debate ante el reto más importante de la Humanidad, teniendo muy en cuenta que el Mediterráneo será una de las zonas más afectadas por el cambio climático». La presidenta subrayó que «en la lucha contra el cambio climático no sólo valen los planteamientos políticos, pues es una lucha compartida con la ciudadanía y su participación es un valor añadido. A partir de aquí, hay que aplicar políticas valientes para mitigar los efectos del cambio climático».

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Herramienta

Clara Ferragut, del equipo coordinador de Assemblea pel Clima, explicó que «las asambleas ciudadanas son un mecanismo de participación y deliberación. En el caso del cambio climático, los científicos explicarán sus procesos y la asamblea presentará propuestas a los políticos. Son una herramienta muy útil, como se ve en países de nuestro entorno». Ferragut añadió que «la asamblea balear ofrecerá la perspectiva territorial de unas islas especialmente vulnerables al cambio climático, y permitirá el trabajo conjunto entre instituciones y sociedad en cuestiones como alimentos, agua, economía, turismo o transporte, siempre bajo un prisma de justicia social».

Los miembros de la asamblea se eligen por sorteo a partir de una muestra social representativa que tiene en cuenta parámetros como edad, género, renta o nivel de estudios, entre otros factores. Clara Ferragut señaló que «en la asamblea balear habrá una especial representación de los jóvenes, pues ellos serán los que sufrirán el cambio climático».