Estas Navidades se han visto largas colas de gente que quiere hacerse un test de antígenos; Salut recuerda que puede solicitarse a través de una web. | Jaume Morey

Los expertos de Baleares consideran prematura la estrategia anunciada por el presidente Pedro Sánchez para ‘gripalizar’ la COVID-19, es decir, empezar a tratarla como una enfermedad endémica y hacer su seguimiento a través de una red centinela de profesionales. «Está bien que se prepare pero no hay que pensar que estamos en ese momento», afirmó ayer Joan Carles March, especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública.

«No es el momento, además hablar de esto da una visión de normalización que no es real porque la gente sigue ingresando y muriendo, la situación no es de normalidad ni mucho menos», incide el experto. March prefiere ser cauto porque todavía no se sabe cómo evolucionará una pandemia en la que el registro de casos es irreal, «mucho menor de los que realmente hay», añade. Lo mismo opina el portavoz autonómico de enfermedades infecciosas, Javier Arranz. «Está bien empezar a trabajar en cómo actuar dentro de un tiempo porque una red centinela es difícil de organizar, pero de entrada, lo ideal es que Atención Primaria vuelva a la normalidad, que todos los profesionales vean de nuevo a todo tipo de pacientes», explica. Cabe destacar que ahora en los centros de salud hay personas que específicamente ven a pacientes COVID y, dada la saturación actual, el resto de profesionales asumen parte de esta carga de trabajo.

En caso de que en un futuro se normalice la COVID-19 y ésta pase de pandemia a enfermedad endémica, «dejaríamos de hacer pruebas a todos a los sintomáticos, lo que es un cambio importante», observa Arranz. La red centinela para la gripe, de la que el mismo médico formó parte en su día, hace un seguimiento aleatorio de pacientes que presentan síntomas compatibles con la enfermedad. Los resultados no son los casos reales pero sí son extrapolables a cómo está circulando el virus entre la población.

Noticias relacionadas

«Se hace con dos vertientes, la hospitalaria, donde se ven las infecciones respiratorias agudas y la de primaria», explica el jefe del laboratorio de Microbiología de Son Espases, Antonio Oliver. «A nivel de centros de salud es imposible llevar todos los casos, por eso hacen un muestreo», explica. El método funciona muy bien para la gripe pero para la COVID-19 «hay que planificarlo y trabajarlo», señala. Por lo que «la idea me parece razonable, pero no lo aplicaría ahora mismo, en esta ola. Entiendo que tampoco es la idea que tiene el Gobierno», añade.

El jefe de la UCI de Son Espases, el doctor Julio Velasco, pide a los responsables políticos que «no sean tan taxativos». «No sabemos muchas cosas, no sabemos qué pasará, hay que ser cautos en las declaraciones y dejar las puertas abiertas porque se llegó a decir hace pocos meses que habíamos superado la pandemia y mira», recuerda.

Casi el 95% de ómicron en Ibiza
La variante ómicron ha sido detectada en el 85,3 % de las muestras de pacientes de covid-19 de Baleares por el Servicio de Microbiología del Hospital Universitario Son Espases, durante la última semana del año 2021. La incidencia de esta variante es distinta por islas, de manera que supone el 84,3 % de las pruebas analizadas correspondientes a Mallorca, alcanza un 94,2 % en el caso de Ibiza y es del 83,5 % en Menorca, según datos facilitados por la Conselleria balear de Salud. En la semana del 20 al 26 de diciembre, esta variante se encontró en el 37,1% de las pruebas analizadas.