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El escritor Juan Goytisolo, candidato al Premio Cervantes desde hace años, ganó ayer el Premio Nacional de las Letras Españolas, que le ha concedido el Ministerio de Cultura en reconocimiento a una de las trayectorias más sólidas de las letras españolas.

Este galardón, uno de los más prestigiosos de cuantos se conceden en España, está dotado con 40.000 euros y en su pasada edición recayó en la escritora Ana María Matute.

Considerado por Carlos Fuentes como uno de los mejores novelistas contemporáneos en lengua española, Goytisolo acababa de llegar de México cuando le sorprendió la noticia del premio, pero en lugar de cambiar sus planes, decidió irse a dar un paseo.

Ese detalle revela la tranquilidad con que se suele tomar los premios y reconocimientos Juan Goytisolo, que ha merecido además galardones tan importantes como el Premio Rachid Mimumi 1995 de París a la Tolerancia y la Libertad, el Octavio Paz de Literatura en México (2002), y el Juan Rulfo de Literatura Latinoamericana y del Caribe (2004).

Afincado en Marraquech desde hace años y gran conocedor de la cultura árabe, Goytisolo nació el 6 de enero de 1931 en Barcelona y es hermano del poeta José Agustín, fallecido en 1999, y del escritor y académico Luis Goytisolo.

Publicadas sus dos primeras novelas, Juegos de manos (1954) y Duelo en el Paraíso (1955), vivió exiliado en París (1956-1969) como asesor literario de la prestigiosa editorial Gallimard. Autor de una amplia obra, en la que figuran novelas, ensayos, memorias y libros de viaje, entre sus libros figuran títulos como Señas de identidad, Reivindicación del conde don Julián, Juan sin Tierra, Makbara, Paisajes para después de la batalla, Crónicas sarracinas, Las virtudes del pájaro solitario, Carajícomedia y Telón de boca.

Después de cinco años sin publicar una novela, Juan Goytisolo acaba de lanzar al mercado El exiliado de aquí y allá (Galaxia Gutenberg/Círculo de Lectores). «No formo parte del círculo de los que escriben para ganar dinero», señalaba Goytisolo en septiembre en Madrid durante la presentación de su última novela.

Los autores

Goytisolo, que ayer viajaba en avión rumbo a Marruecos procedente de México donde ha estado presentado su último libro, explicó entonces que «son los autores los que honran o deshonran a los premios». «Cuando pasas de los 75, no ambicionas nada. Estoy en absoluta libertad y vivo completamente al margen», afirmó el escritor catalán, quien considera que España «está pendiente de una transición cultural que elimine los tabúes».

Goytisolo, que en la actualidad vive en Marrakech, ha ambientado El exiliado de aquí y allá en París y retoma el personaje del monstruo del Sentier, que murió al final de Paisajes para después de la batalla. Proyectado «al más acá de la muerte», el protagonista contactará a través de Internet con radicales de toda índole. Y descubrirá la verdad de la sociedad en la que sólo se busca «el poder, el dinero y el mando». «Soy incapaz de escribir una novela con diálogos teatrales. No me interesa. En ésta he buscado la concentración y no la extensión. La prosa en acción», afirmó Goytisolo, quien reconoció que ha dejado el argumento en «un segundo plano».