Julio HerranzEivissa24/08/10 0:00
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Entre el entusiasta equipo de profesionales que trabajan en la organización del festival Eivissa Jazz, hay algunos que pasan desapercibidos para la galería, pero sin cuya labor (discreta y eficiente), las cosas no funcionarían igual, desde luego. Es el caso del director artístico del evento, Juan García Merayo, a quien hoy hacemos salir a la palestra de estas páginas para que explique a los lectores de Ultima Hora la recámara del veterano festival ibicenco de jazz. Un encuentro que ha pasado por varias etapas, cambios y no pocas dificultades que, en alguna edición reciente, pusieron en un brete su continuidad.

-¿Qué singularidad destacaría de esta edición del festival?

-Algo muy curioso, que va a ser la segunda crisis económica que supere; a pesar de que este año ha sido muy achuchado y el programa pensado inicialmente, mucho más amplio y distinto, se ha tenido que rectificar y ajustar a las condiciones económicas que, por desgracia, nos está tocando vivir al país.

-Cuando cambió la dirección de Eivissa Jazz se dijo que apostaría más por el jazz latino. ¿Sigue en pie tal intención?

-A ver, hay un compromiso inicial muy importante, que es la promoción de músicos españoles jóvenes. A partir de ahí, damos una de cal y otra de arena, con una mano tendida a los músicos latinos. Lo que pasa es que muchas veces resulta complicado traerlos porque están carísimos; o, en el caso cubano, es bastante difícil, la verdad, sacarles de la isla y pagarle los viajes; aunque, eso sí, el cachet sea luego muy barato.

Este año había pensado traer un grupo cubano para hacer una historia de teatro y jazz en la calle; algo muy interesante, pero desistí por el precio.

-Ni tampoco hay esta vez la habitual 'marching band'.

-No ha podido ser; y para compensar, pensamos (por eso se cambió el Espai Eivissa del Mercat Vell al paseo Vara de Rey) hacerlo más festivo al inicio con la Eivissa Big Band y con un repertorio de música de cine que a la gente le suene. Creo que el cambio va a funcionar, ya verás.

-¿Tendrá continuidad, como pasa con el grupo ganador del Festival de Getxo, que venga a Eivissa Jazz el ganador del Concurso de Grupos de Jazz de Barcelona?

-Este año ha sido un guiño a Barcelona, una máquina constante de músicos; la mitad de los del país pasa por allí. En 2009 hubo la oportunidad de colaborar con ellos; les dijimos que si se podría incluir en el premio un concierto en el festival de Eivissa, y quedamos en ello. Es una propuesta viva que espero se vaya consolidando.

En cuanto al jazz joven europeo, estamos en Europa y es muy importante promocionar músicos del continente. Como a los de la isla, pues estamos aquí y hay que hacer cantera.