Armin Heinemann durante un ensayo de 'La flauta mágica' de Mozart.

«Siempre pasa igual: unos días antes del estreno son momentos muy difíciles en los que paso de bajadas de ánimo en que estoy a punto de suicidarme a la euforia total». Con estas palabras, Armin Heinemann resumió ayer a este periódico la tensión que, como responsable principal del proyecto, siente ante el estreno el próximo lunes día 20 (21,00 horas) en el Palau de Congressos de Santa Eulària de La flauta mágica de Mozart; de nuevo relacionada con Eivissa, como el escenógrafo, diseñador y arquitecto alemán residente en la isla desde los 70 hizo con La Traviata y Rigoletto. «Acaso esta vez más, porque es una obra muy compleja y grande, interviene mucha gente y, además, en esta ocasión tenemos orquesta y coro», añadió.

El tercer montaje operístico de Heinemann en Eivissa contará con la participación de 15 cantantes; entre ellos, seis de la isla; el Cor Ciutat d'Eivissa, con 45 voces; una orquesta con 18 músicos de la isla, y 14 figurantes. Más una serie de elementos escénicos singulares y la proyección de vídeo y fotografía. «Aquí todo es más complicado porque no hay tradición de este tipo de espectáculos. Cuando tienes un teatro en una ciudad grande, hay departamentos para todos los elementos de producción: ensayos, vestuario, control de escena, luces... Pero en la isla hay que arreglarlo con gente que conoces, que a veces dicen no y otras sí, falla esto, lo otro, y es entonces cuando te da la depresión», consideró.

Impresión general

Sentimientos encontrados que, finalmente, contribuyen en su tensión a potenciar el resultado. «Porque cuando estás metido en el escenario, con los cantantes y demás, vuelve el optimismo; pues la obra es muy bonita, la música de Mozart es genial, lo más; tenemos gente muy buena, los protagonistas y todos los cantantes son muy buenos, igual que los figurantes. Así que, aunque son momentos críticos, tengo la sensación de que todo va a resultar muy hermoso», aseguró el fundador de la firma Paula's.

En cuanto a su insistencia en transferir de nuevo la ópera original a Eivissa, Heinemann señaló: «Para mí siempre es muy importante que la gente que vive aquí vea una relación con la isla, separada de lo abstracto artístico universal, como es Mozart; porque como en Eivissa no conocen aún muchas óperas, creo que es mejor que la gente se identifique con ellas. En este caso, mediante Tanit y Bes; como una ayuda para que la disfruten mejor», subrayó el director de escena, añadiendo: «Aquí Tanit representa la naturaleza, a veces tranquila, pero otras muy enérgica y destructora; y Bes, tras su marca de virilidad, la claridad y elevación del espíritu del espíritu», apuntó.

Además del lunes, La flauta mágica repite el miércoles y viernes (21,00 horas) y el domingo (19,00 horas). Las entradas pueden comprarse por adelantado en el Ayuntamiento de Santa Eulària (lunes a sábado, mañana), o reservarlas en el 648045045.

Crítica

Al estreno del montaje ibicenco de La flauta mágica de Mozart (el lunes 20 en el Palau de Congressos) asistirán Jordi Maddaleno, crítico de la revista Ópera Actual, y Roger Alier, catedrático de la Universidad de Barcelona, autor de numerosos libros sobre música y ópera, así como de un trabajo sobre La flauta mágica, y crítico de ópera de La Vanguardia. Además del crítico musical de este periódico, Adolfo Villalonga.

Sobre los dos críticos catalanes, Armin Heinemann apuntó que «por una parte es una gran satisfacción, pero por otra aumenta la presión para que todo salga bien; y eso es bueno para la obra y para la producción», precisó el responsable del proyecto, añadiendo: «Hemos trabajado ya cuatro años en ópera y llegado a un punto en el que gente profesional reconoce el trabajo que estamos haciendo. Pues no es fácil que unos críticos de Barcelona, reclamados por las grandes producciones operísticas del mundo, vengan a Eivissa. No lo hacen porque yo se lo pida, sino porque conocen las producciones que hemos hecho en Barcelona (Il Signor Bruschino de Rossini (2008) y La serva padrona de Pergolesi (2010); para el Festival de Música de Canet de Mar) y tienen interés por ver qué es lo que hacemos en la isla», valoró el director del montaje.