El clarinetista, ayer, en el Conservatori durante su actuación que le valió el primer premio. | Marco Torres

Los últimos ensayos no cesaron ayer durante toda la jornada para los cuatro finalistas del concurso Art Jove 2010. El Conservatori Professional de Música i Dansa d'Eivissa i Formentera acogió ayer a las 20 horas la final del certamen de solistas en el que participaron Cristina Allés, Carlota Cáceres, Daniel Pons y Óscar Almodóvar, quien finalmente se alzó con el primer premio otorgado por el jurado.
La joven pianista mallorquina Cristina Allés, desbordante de alegría horas antes de su actuación reconoció que «llegar a la final ya es todo un reconocimiento, porque no siempre se llega». Allés interpretó la obra Papillons, de Schuman. La escogió por tratarse de una composición que consta de varias piezas cortas que le permitieron ajustarse al minutaje que exigía la organización. Y es que las actuaciones no podían superar los 15 minutos. Papillons representa varias escenas, con varios personajes que forman parte del carnaval veneciano. Esta estudiante, de 17 años, que estos días se prepara para el examen de selectividad lleva tocando el piano desde los nueve años y le dedica a este instrumento entre cuatro y cinco horas diarias. «Llegar hasta aquí es una enorme alegría y nos permite demostrar ante el público todo el esfuerzo para que ellos disfruten», concluía la joven.
Por otra parte, Daniel Pons (Mahón, 1982), que se alzó con el segundo premio, dotado con 1.000 euros, hacía patente su ilusión horas antes de su actuación porque, según reconocía él mismo, no se había presentado a muchos concursos. De hecho, era la primera vez que se presentaba al de Art Jove. Ayer interpretó sobre el escenario un repertorio de guitarra clásica que incluía una pieza de Heitor Villa-Lobos, otra de John Dowland y dos movimientos de una sonata de Joaquín Turina. «No puedes tocar obras muy fáciles», resaltaba ayer Pons, que añadía: «Aunque sean obras conocidas o te gusten mucho no deben ser fáciles, no pueden exceder el tiempo que marca la organización y tienen que resultar atractivas, tanto para el músico como para el público y el jurado». A sus 28 años, Pons da clases en un centro de Binissalem. Como Cristina Allés y la percusionista Carlota Cáceres, que interpretó una pieza de Polo Vallejo Tactus para seis tambores y siete fragmentos para marimba y vibráfono, el menorquín valoró el reconocimiento que supone llegar a una final tras muchas horas invertidas en ensayos.
Pasadas las 21,30 horas el jurado emitió su veredicto y premió el trabajo y la magnífica ejecución del clarinetista Óscar Almodóvar de la pieza de Jean Francaix, Concert per a clarinet y orquestra para el que contó con el acompañamiento de un pianista y con el que dejó boquiabiertos a todos los asistentes al concierto.