Parecía que habría un antes y un después de la pandemia, algo que podría afectar de forma muy directa al turismo: cómo y cuánto viajamos, dónde nos hospedamos o las medidas legales, que eran una incógnita. Sin embargo, a día de hoy, se puede decir que todo sigue igual. Realmente, para el sector las perspectivas son mejores. Precisamente esta semana se ha celebrado en Palma el Desayuno Temático de Inversión destinado al turismo con la presencia de Jaume Puig, director general de GVC Gaesco (gestionan el único fondo de inversión que invierte 100% en esta temática).

En dicho evento se mostraron cuatro claves:
El incremento de la clase media, especialmente en Asia. Está claro que el gran impacto del turismo es precisamente en familias con esas condiciones económicas.
Además, parece que las nuevas generaciones tienen más propensión a viajar, de hecho la «generación milenial» está viajando mucho más que los «baby boomers».
A corto plazo, el ahorro que viene de la COVID no se ha agotado, ni mucho menos, mientras que a largo plazo el mundo está creciendo a niveles razonables con crecimiento del turismo por encima del crecimiento del PIB con independencia de la ralentización a corto plazo que se está viviendo en el mundo.

A la hora de invertir en el sector hay que saber bien cómo hacerlo: se trata de un segmento de la economía con muchos «subsectores» y como se puede ver en el gráfico no todos se están comportando igual, ni siquiera las compañías que desempeñan la misma función en el mundo turístico.
Evidentemente hay multitud de aerolíneas cotizadas: en España cotiza la multinacional IAG, cuyo funcionamiento y resultados son muy diferentes a una «low cost» como Ryanair.

También hay mucha hotelera, la única cotizada mallorquina en mercado continuo, Meliá, es la principal en España. En Europa cotiza Accord y en EEUU Hilton o Marriott.
Pero no solo de aviones y hoteles vive el turismo: hay cruceristas, cotizadas como Carnival o Lindblat (lujo), hay turismo de carretera como rent a car (Sixt, Herz) o caravanas con un gran crecimiento (Trigano).

Las infraestructuras aeroportuarias son muy importantes: en España cotiza Aena desde que el Gobierno vendió un 49% de la misma y últimamente ha sido penaliza por las palabras de la propia vicepresidenta del Gobierno sobre posibles limitaciones a los viajes en avión. Por supuesto, también se puede invertir en turoperadores como TUI o hacerlo en empresas con componente tecnológico como Amadeus, Booking o Tripadvisor o en compañías que se benefician como Dufry (tiendas en aeropuertos) o empresas que ellas solas son destinos turísticos: Disney.

Vista la variedad,los fondos de inversión, como siempre, ayudan mucho aunque no son muy activos en este sector: hay ETFs (fondos cotizados) que invierten en «turismo y ocio» con muchas apuestas online en su cartera. Por lo tanto, la única alternativa 100% turística para quien no quiera o pueda hacer una selección e integrar en cartera este sector es GVC Gaesco 300 Places Wordwide cuyas primeras posiciones son Carnival y Dufry.