MALLORCA - HOTELES - REFORMAS HOTELERAS EN MALLORCA. Sotavento. El complejo de hotel y apartamentos Sotavento de Magaluf está realizando importantes reformas de cara a la próxima temporada. | A.G.

El proceso de reforma y modernización de hoteles es constante. El Económico ha informado de la evolución de la actualización de la planta de establecimientos turísticos de forma anual desde el lejano 2015.

La apuesta por la calidad requiere de forma inequívoca hoteles modernos y en excelentes condiciones. De esta manera, las reformas hoteleras se han convertido en una obligación que está condicionada por la política turística del Govern. En este sentido, las facilidades otorgadas a los empresarios para reformar sus establecimientos ha provocado una avalancha de mejoras en los hoteles, que han contribuido también a la dinamización de la economía de Balears.

La Ley 8/2012 del Turismo de les Illes Balears, impulsada por el presidente José Ramón Bauzá con Carlos Delgado de conseller de Turisme y Jaime Martínez de director general provocó un aluvión de reformas hoteleras. Martínez, que sustituyó a Delgado cuando el calvianer abandonó la política, fue el ideólogo de una ley que permitía, por ejemplo, el incremento de plazas. La normativa, en su disposición adicional cuarta, facilitaba el incremento de la edificabilidad en un 10% en establecimientos de menos de tres estrellas o tres llaves; del 15% si tenía tres estrellas o tres llaves; y de un 20% los de mayor categoría. Permitía también un incremento de la edificabilidad del 40% en los hoteles de 5 estrellas, siempre y cuando interviniera un arquitecto de reconocido prestigio.

Portadas de El Económico

El Decreto Ley 1/2013, de siete de junio, de medidas urgentes de carácter turístico y de impulso de las zonas turísticas maduras, pretendía fijar una serie de medidas que posibilitaran la inversión y la modernización de los hoteles. Además, permitía ampliar plazas a los establecimientos situados en una zona madura. La nueva normativa permitía en aquellos momentos aumentar una o dos plantas a los hoteles situados en la playa de Palma, entonces la única zona madura de Mallorca. Fijaba también que en ningún caso podías superarse las ocho plantas de altura. La vigencia de la normativa, inicialmente, se fijó hasta julio de 2017.

Las elecciones autonómicas de 2015, que tuvieron lugar en mayo, supusieron un severo revés para el Partido Popular y la llegada al Consolat de Mar de Francina Armengol. Gabriel Barceló (Més per Mallorca) fue inicialmente vicepresidente del nuevo Govern y conseller d’Innovació, Recerca i Turisme. El nuevo Govern reorientó la política turística y en el Decreto Ley 1/2016, de 12 de enero, de medidas urgentes en materia urbanística, modificó la Ley 8/2012 del turismo. Eliminó la posibilidad de destinar el incremento de edificabilidad en zonas maduras a construir una o dos plantas más. De igual manera, eliminaba la posibilidad de ampliar el número de plazas. Eso sí, mantenía la posibilidad de incrementar la superficie edificada.

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En julio de 2017 finalizaba la vigencia de la disposición adicional cuarta de la Ley 8/2012, que permitía a los establecimientos turísticos ampliar la edificabilidad. El Govern dio respuesta a las peticiones empresariales con la ley 6/2017, de 31 de julio. Modificaba la Ley 8/2012 y en su disposición adicional tercera fijaba incentivos para la mejora de los establecimientos turísticos. En este sentido, establecía que los proyectos de modernización hotelera pueden contemplar la reordenación o la reubicación de volúmenes existentes, el aprovechamiento del subsuelo para usos habitables excepto el de alojamiento, así como la redistribución del número de plazas autorizadas. Contempla que pueda incrementarse la superficie edificada, aunque la limita a un 10%. La vigencia queda fijada en tres años, hasta julio de 2020.

El Govern de Francina Armengol impulsó la Ley 2/2020, de 15 de octubre, que en su artículo 7 se refería a los incentivos para la mejora de los establecimientos turísticos. Prohibía el incremento de plazas, aunque sí autoriza aumentar la edificabilidad un 10%, que podrá ser hasta de un 15% si así lo decide el consell insular correspondiente. La vigencia se prolongaba hasta el 31 de diciembre de 2021. Finalmente, el Decreto Ley 3/2022, de 11 de febrero, de medidas urgentes para la sostenibilidad y circularidad del turismo de las Illes Balears, se refería también a los incentivos para la mejora de los establecimientos turísticos.

Permitía incrementar la superficie construida, aunque obligaba también a los hoteleros a una reducción del 5% de las plazas, apostando de esta manera por el decrecimiento. La medida, en todo caso, no fue del agrado de los empresarios y las reformas al amparo de la nueva normativa han sido escasas. El Govern actual de Marga Prohens ha anunciado una nueva reforma de la ley.