Imagen de unas infusiones. | Luisella Planeta en Pixabay

Las infusiones son una buena opción cuando no queremos tomar café o en algunas ocasiones ser un remedio natural para cuando tenemos alguna dolencia. Además, son un gran recurso para tomar probióticos en algunos casos, como las infusiones con extracto de diente de león.

La microbiota intestinal ayuda a regular la función digestiva y los probióticos son las bacterias saludables que se presentan normalmente en los lácteos. Por ello es importante tomarlos y si no nos apetece o nos gusta tomar yogur o kefir, esta infusión es ideal.

Según evidencias científicas, tal y como afirma el medio Heraldo, este extracto tiene una de las cinco sustancias más ricas en prebióticos y puede aportar hasta 240 mg de prebióticos por cada gramo. Otros alimentos que también contienen esta bacteria son el té verde o las cebollas. Por otra parte, los nutricionistas, según el mismo medio, afirman que es beneficioso consumir hasta 5 gramos de prebióticos.

Además, se dice que el extracto de diente de león tienen un elevado contenido en potasio, que ayuda al corazón y los riñones, pero no hay que abusar de ello.

Esta infusión es común tomarla en Alemania y el Ministerio de Sanidad de dicho país recomienda que se prepare mezclando la raíz con las hojas de la planta. Tan solo basta hervir una o dos cucharada de esta mezcla en 150 mililitros de agua y dejar reposar 15 minutos para filtrar y edulcorar al gusto.