El programa de Sonsoles Ónega, Y ahora Sonsoles, abordaba en la tarde del lunes uno de los temas más impactantes de las últimas horas: Araceli, una trabajadora de un cementerio, estuvo atrapada durante media hora a tres metros bajo tierra por culpa de un compañero de trabajo. Tras denunciarlo, una sentencia del Tribunal Supremo le ha dado la razón y este compañero tendrá que cumplir condena por acoso. La protagonista de esta macabra historia contaba al espacio de Antena 3 que su sueño siempre había sido ser enterradora por su abuelo.

Pero lo que Araceli no podía llegar a imaginarse es que su trabajo soñado acabara convirtiéndose en una auténtica pesadilla. Según relataba la propia Araceli, su compañero de trabajo comenzó a acosarla día tras día con frases como ''no queremos mujeres aquí'', ''las mujeres tenéis que estar en casa'' o ''las mujeres solo valéis para fregar''. Entierra viva a su compañera de trabajo tras acosarla laboralmente Entierra viva a su compañera de trabajo tras acosarla laboralmente Atresmedia Pero cuando los insultos se convirtieron en acciones reales, Araceli decidió denunciar a su acosador. ''Tuve que ir a preparar un entierro con él y hay tumbas que son bajo tierra. Pusimos la escalera, yo bajé y él me quitó la escalera y se fue. Me dijo ''ahí te quedas'''', declaraba. Pero a pesar de que la justicia le ha dado la razón, Araceli sigue viviendo con miedo. ''Él sigue trabajando'', confesaba. Momentos después, la entrevistada aseguraba en directo que cuando estuvo atrapada en la tumba de ese panteón llegó a temer por su vida.

''Ahí me di cuenta que tanto los insultos como las vejaciones, todo lo que había sufrido durante esos meses, en ese momento me di cuenta de que podría correr peligro mi vida. O sea que iba a llegar un momento que me iban a hacer algo'', confesaba. Tras seis años luchando para que la justicia le diera la razón, el Tribunal Supremo condenaba al acosador a nueve meses de prisión y a pagar a la víctima una cuantía de 3.000 euros más las costas judiciales. ''Me parece poca pena para los seis años que llevo sufriendo. Pero al menos se sabe la verdad y está condenado'', aseguraba. Sin embargo, la pesadilla de Araceli no había llegado a su fin ya que el próximo jueves debe reincorporarse al trabajo con miedo a encontrarse a su acosador. ''Compartimos nave todos los servicios del ayuntamiento y vestuarios y puedo encontrármelo. Tendré que ir no me queda otro remedio'', aseveraba. Además, según contaba en espacio de Antena 3, el ayuntamiento de Langreo les había confirmado que habían cambiado al delincuente de puesto de trabajo. ''Le han cambiado del servicio de cementerio al de limpieza, pese a ello se lo tiene que seguir encontrando'', comentaba el reportero del programa.

En la tarde del lunes, el programa "Charlas con Sonsoles" dirigido por Sonsoles Ónega, abordó uno de los eventos más impactantes de las últimas horas: Araceli, una empleada del camposanto, quedó atrapada bajo tierra durante treinta minutos debido a la acción de un colega de trabajo. Después de presentar una denuncia, una sentencia del máximo tribunal le otorgó la razón, condenando al acosador a cumplir una pena por hostigamiento.

Araceli, protagonista de esta espeluznante narrativa, compartió en Antena 3 que su aspiración siempre fue trabajar como sepulturera, inspirada por su abuelo. Sin embargo, jamás habría imaginado que su anhelo laboral se transformaría en una auténtica pesadilla. Según su relato, su compañero comenzó a hostigarla diariamente con comentarios despectivos como "las mujeres no pertenecen aquí", "tu lugar está en el hogar" o "el único valor de las mujeres es la limpieza".

Cuando los insultos se convirtieron en acciones tangibles, Araceli decidió alzar la voz y denunciar a su agresor. Narró cómo durante la preparación de una sepultura, él removió la escalera mientras ella estaba bajo tierra, abandonándola con un siniestro "quédate allí". A pesar del fallo judicial a su favor, Araceli sigue viviendo con temor. "Él sigue en su puesto de trabajo", confesó.

En una impactante revelación en directo, Araceli confesó que mientras estuvo atrapada en la tumba, temió por su vida. Reconoció que en ese momento se percató de que tanto los insultos como las humillaciones sufridas durante meses podrían poner su vida en riesgo.

Después de seis años de batalla legal, el Tribunal Supremo condenó al acosador a nueve meses de prisión y a indemnizar a la víctima con 3.000 euros, más los costos legales. A pesar de esta sentencia, Araceli aún enfrenta su angustia, ya que debe regresar al trabajo el próximo jueves, con el temor de encontrarse nuevamente con su acosador. "Compartimos el mismo espacio y vestuarios, no tengo otra opción", lamentó.

Además, según reveló en el programa de Antena 3, el ayuntamiento había transferido al delincuente a otro departamento, de limpieza, sin embargo, Araceli aún teme encontrárselo en el lugar de trabajo.