La Junta Electoral confirmó ayer las sospechas del PSOE y proclamó vencedor de las elecciones municipales de Ibiza al candidato socialista a la reelección como alcalde, Rafa Ruiz, que contará con nueve concejales. Con el apoyo de Podemos-EU tendrá la oportunidad de seguir gobernando la capital de Ibiza otros cuatro años. Un nuevo recuento confirmó los errores que se produjeron durante la jornada electoral a la hora de contabilizar los votos de la lista del PSOE en 11 de las 52 mesas de la ciudad. El error, además, deja sin representación en el Ayuntamiento a Proposta per Eivissa (PxE), Vox y Ara Eivissa. Y evidentemente relega al PP a la segunda posición y por tanto, a ejercer de oposición. El candidato del PP, José Vicente Marí Bosó, felicitó a Ruiz y asumió deportivamente su nuevo rol político.

Ruiz gana.
En primer lugar hay que felicitar a Rafa Ruiz y al PSOE, que con apenas tres días de diferencias ha pasado de la decepción a la euforia, de verse en la oposición a poder seguir gobernando cuatro años más con los dos concejales de Podemos-EU, Aitor Morrás y Claudia Cotaina, a quien el candidato socialista ya ha propuesto que se sumen al nuevo gobierno. La otra cara de la moneda es Marí Bosó, declarado vencedor en la madrugada del domingo y ayer fue despojado de la victoria por un escrutinio electoral erróneo. Aún así, el resultado obtenido por Marí Bosó es meritorio en el contexto general que ha vivido el PP.

Responsabilidades.
A partir de ahora solo queda que se depuren responsabilidades sobre qué ha ocurrido. Los ciudadanos tienen todo el derecho a saber quién ha fallado de esta forma tan clamorosa y vergonzosa. No es posible que en cuestión de tres días pueda cambiar un resultado electoral por unos errores no en una mesa, sino en 11 mesas electorales. Y no ha ocurrido solo en la ciudad de Ibiza sino también en otros ayuntamientos españoles. Los ciudadanos merecen una explicación porque este episodio ha sido bochornoso e indigno de una democracia consolidada como la española. El Ministerio del Interior debe depurar responsabilidades.