La decisión del Govern de construir un tranvía entre Palma y el aeropuerto ha provocado indignación en Ibiza. Desde el Consell d’Eivissa critican que el Gobierno de Sánchez invierta 185 millones en dicha infraestructura cuando en Ibiza existen muchas carencias por la falta de inversión estatal. En este sentido, el vicepresidente del Consell, Javier Torres, criticó que el Gobierno apostase por realizar inversiones en Mallorca mientras muestra su indiferencia con el resto de islas. Torres también cuestionó el papel de Josep Marí ‘Agustinet’, el conseller ibicenco y responsable de Transportes del Govern, de quien dijo que muestra una actitud servilista respecto a Mallorca.

Una inversión cuestionable.

La puesta en marcha de un tranvía en Palma genera obligatoriamente suspicacias. Porque nadie puede olvidar que dentro de pocos meses se celebran elecciones y el Govern necesita dar un golpe de efecto tras una legislatura donde ha suspendido en materia de inversiones. El tranvía es caro (185 millones es una inversión desmesurada) pero también es cuestionable su necesidad. Cualquier ibicenco y formenterense que viaja habitualmente a Mallorca sabe perfectamente que el servicio de autobús entre el aeropuerto y Palma está muy bien cubierto.

Necesidades en Ibiza.

La millonaria inversión del tranvía de Palma contrasta con la indiferencia mostrada por el Gobierno con el convenio de carreteras de Ibiza. Pero lo más llamativo es que el jueves el PSOE reivindicaba a su manera un tranvía para Ibiza, una propuesta electoral de la etapa de Vicent Torres que nunca llegó a fructificar. Más allá de propuestas populistas y millonarias que benefician exclusivamente a Mallorca, sería deseable que los socialistas intentasen presionar para mejorar las inversiones en Ibiza. No es coherente reivindicar a diario un mejor transporte para Ibiza y silenciar los privilegios de Mallorca. Los caprichos solo para los mallorquines deberían ser historia.