Carles Puigdemont y su entorno están dispuestos a paralizar el Estado en caso de que el PSOE no ceda con el referéndum y la amnistía. En Junts per Catalunya apuestan claramente por repetir elecciones y n pactar con los socialistas, cuya primera prioridad es alcanzar un acuerdo para asegurarse la Mesa del Congreso de los Diputados.

No será nada fácil

Tanto Junts per Catalunya como ERC, con la vista puesta en las elecciones catalanes, están dispuestos a dar sus apoyos a Sánchez si el actual presidente en funciones del Gobierno acepta un referéndum de autodeterminación en Cataluña, vinculante por supuesto, y la amnistía de todos los condenados por el 1-O. De esta manera Carles Puigdemont podría regresar de su exilio en Bruselas y participar activamente en la política catalana. Dirigentes socialistas han mantenido esta semana reuniones con representantes de aquellas formaciones políticas que podrían apoyar a Sánchez, pero el contenido de las negociaciones no ha trascendido.

O gran pacto o nuevas elecciones

Hay una cosa muy clara: Núñez Feijóo no tendrá los votos necesarios para ser investido presidente del Gobierno. No tiene la más mínima posibilidad para presentarse a la investidura. Pedro Sánchez sí tiene más opciones, pese a tener menos escaños que el líder del PP, pero las condiciones que imponen las fuerzas independentistas no pueden asumirse de ninguna manera. Convocar un referéndum vinculante en Cataluña es una opción que no debería ni negociarse y por todo ello lo aconsejable es que arranque el calendario institucional con la formación de la Mesa del Congreso y, posteriormente, dar los pasos necesarios para convocar unas nuevas elecciones. Ya ocurrió algo similar hace unos años y es una opción perfectamente válida, pero lo que no se puede es aceptar condiciones imposibles. Ni siquiera Sánchez puede consentirlo.