Cuando un político defiende la necesidad de pagar más impuestos para sostener los servicios públicos debería estar obligado a demostrar que se está gestionando el dinero público con responsabilidad y eficacia. Este periódico informaba este domingo que los funcionarios de prisiones, a través del sindicato ‘Tu abandono me puede matar’, han denunciado que en la prisión de Ibiza apenas hay un empleado público para cada 40 o 50 presos, un número que crea graves problemas de inseguridad a los trabajadores del centro penitenciario.

Situación peligrosa

El asalto de un furgón policial que trasladaba el pasado lunes a un preso pone en evidencia que en Ibiza hay reos que disponen de una importante infraestructura en el exterior y que, por lo tanto, son individuos peligrosos que merecen un trato muy específico en el interior de la cárcel. El sindicato ‘Tu abandono me puede matar’ destaca que en la isla cada vez hay más delincuentes que pertenecen a bandas criminales y que, por lo tanto, merecen una atención especial. Sin embargo, no hay medios para hacerlo. De hecho, en los últimos meses tres trabajadores han solicitado la baja por lesiones.

Sin reacción

Lamentablemente la precaria situación de la plantilla de la cárcel de Ibiza no es una excepción. Falta personal en la Dirección General de Tráfico, en Correos, en la Policía Nacional y en la Guardia Civil. En Tráfico han tenido que llegar a cerrar varios días a la semana porque no hay personal para atender a los ciudadanos. El deterioro de los servicios públicos que dependen del Estado es cada vez mayor y, lamentablemente, no se percibe ninguna reacción. No se conocen convocatorias para contratar trabajadores con el objetivo de reforzar estos servicios y la máxima responsable del Estado en Balears no da la más mínima explicación a los ciudadanos que pagan sus impuestos para disfrutar de unos servicios públicos dignos. La situación es tan grave que merece una reacción conjunta de toda la clase política pitiusa y de una sociedad que tiene motivos para sentirse engañada.