El Seven Seas Splendor inauguró este pasado miércoles la temporada de cruceros en Ibiza. Se espera que durante este mes de abril lleguen 14 buques, el doble que el año pasado en el mismo mes. Las patronales y empresas de Ibiza han acogido de forma positiva la llegada de este tipo de turistas, pero señalan que durante la pasada temporada apenas tuvo efectos positivos para sus ingresos, sobre todo en el centro de Vila. Aún así, el presidente de los vecinos de La Marina, Joaquín Manuel Senén, ha reconocido que esperan impacientes la llegada de esta temporada después de una Semana Santa muy negativa para los establecimientos abiertos en el barrio.

La evolución.

Desde la Pequeña y Mediana Empresa de Ibiza y Formentera (Pimeef) han destacado que el turismo de cruceros ha evolucionado. Lo que hace unos años se consideraba elitista ahora mismo se ha diversificado y resulta muy positivo en la actualidad para dar a conocer la isla. El presidente de Pimeef, Alfonso Rojo, admite que la llegada de un crucero supone un antes y después para la temporada turística. El objetivo, esgrime Rojo, es que el crucerista valore la importancia del pequeño comercio.

Más regulación.

Es indiscutible que el turismo de cruceros es positivo para la economía de Ibiza. Los cruceristas son turistas que gastan más que la media, que tienen un gran interés por conocer todos los destinos en los que recalan, y aprovechan para hacer compras o incluso disfrutar de la gastronomía local y de la oferta cultural. Sin embargo, no convendría repetir los errores del pasado. Es importante coordinar la llegada de cruceros y que los turistas que llegan a Botafoc dispongan de un transporte ágil y rápido para acceder al centro de la ciudad o a otros puntos de la isla. Convendría que las instituciones actúen coordinadamente, que trabajen entre ellas, pero no sería deseable que, como ha ocurrido otros años, se busquen soluciones sobre la marcha. Sin una buena coordinación se conseguirá el efecto contrario al que se persigue con este tipo de turistas: que Ibiza dé una imagen de caos para todos aquellos que quieren visitarla.