He hecho muchas cosas en estos 44 años. Algunas buenas y otras regulares que prefiero no recordar por más que cuando las cuento siempre levantan una sonrisa de quien las escucha. Llevo casi media parte de mi vida trabajando de periodista, he presentado programas de televisión, he hecho periódicos gratuitos, revistas, guiones para programas, he maquetado en un conocido periódico deportivo, he trabajado más de una década en la sección de cultura y sociedad en Ibiza y ahora me desempeño con más o menos acierto en una radio en la que me han acogido con los brazos abiertos. Incluso, de vez en cuando, he dado alguna que otra conferencia y he presentado galas solidarias a pesar de no ser más que un humilde escribiente.
Sin embargo, nunca había participado en la elección de unos premios, más allá de alguna votación informal entre cañas para elegir al capitán de un equipo, a ese que tenía que comprar algún regalo o al encargado de algo en concreto. Pero unos premios y además tan importantes como los Premios Onda Cero Ibiza y Formentera es otro nivel. Es como pasar de jugar en la preferente como se llamaba cuando yo era joven a hacerlo en Champions League por más que algunos piensen que soy muy exagerado. Y es que solo cuando estás dentro te das cuenta de la magnitud del asunto, del enorme trabajo que hay detrás en la organización y coordinación para que todo salga perfecto, y de la enorme responsabilidad que supone elegir a los premiados de cada año.
Que quede claro que ni el director de la emisora en Baleares Juan Carlos Enrique ni nuestro querido Martí Rodríguez periodista de Onda Cero en Palma, ni el gran Agustín Prades ni la siempre sonriente Belén Cerro, ni por supuesto yo, elegimos quien gana en cada edición sino que lo hace un jurado formado por algunos de los mejores profesionales de la isla de Ibiza. La siempre sonriente y divertida Antònia Maria Cirer es la presidenta de honor del jurado y la portavoz tras haber sido elegida por unanimidad pero junto a ella destacan María Matutes Prats, el músico y profesor Juan Francisco Ballesteros, el gerente de Fomento del Turismo de la isla de Ibiza, José Antonio Marí, el reconocido economista José Antonio Avellaneda, la directora del Arxiu Històric d’Eivissa i Formentera, Fanny Tur y el presidente de PIMEEF, Alfonso Rojo. Un dream team auténtico, una alineación de ensueño, compuesta por hombres y mujeres que destacan por su amplio conocimiento y enorme calidad humana.
Su decisión no fue nada fácil porque si algo he descubierto durante estos años es que estas dos islas, a pesar de no ser muy grandes, albergan cientos de candidatos potenciales a llevarse el premio en cada categoría. De hecho, seguro que muchos de ustedes cuando leyeron o escucharon el listado les vinieron a la memoria otros que creen que se lo merecen más o que están entre sus favoritos. No les culpo porque a mí cuando tuvimos que proponer personas físicas o empresas me costó sobremanera hacer una selección porque si de algo vamos sobrados en Ibiza, además de turistas en verano, es de buena gente.
Al final son los que son y recibirán su premio el jueves 27 de abril en una gran gala en el Centro Cultural de Jesús. Será entonces un gran momento para ver sobre el escenario a mi querido y admirado Agustín Prades junto a nuestra compañera Chelo Bustos, al magnífico y polifacético compositor Chris Martos y a todos los que recibirán el premio de 2023. Será por tanto una gran oportunidad para presumir de que en Ibiza y Formentera tenemos muchísima gente de calidad y un valor incalculable. Algunos más jóvenes como el músico Frank Cogollos, que tan buen trabajo hace con los más pequeños de la isla, o el periodista, amigo y gran cronista de Formentera, Toni Ruiz, y otros más veteranos como el médico Toni Florit; Carmen Tur a la que tanto debemos en materias como la radioterapia o la recuperación de nuestra historia y nuestra cultura; Vicente Marí Torres, Joan Marí Tur Botja o el grandísimo, con mayúsculas, cantautor Joan Moreno, son personas que se tendrían que estudiar en los institutos y colegios para que nuestros jóvenes tuvieran referentes de verdad. Y por supuesto, la Fundación Conciencia con un trabajo no siempre suficientemente reconocido con niños y niñas que no tienen tanta suerte como los nuestros; Familia Marí Mayans; la Fonda Platé de Formentera, la SD Portmany o l’Escola d’Arts, una escuela que nos demuestra día tras día que la cultura y el arte también se puede estudiar y aprender.
En fin, 12 premios para este 2023. Pero igual que están ellos podrían estar otros muchos como ya lo hicieron los que ganaron las ediciones anteriores porque si algo me ha quedado claro con este proceso es que ser jurado en algo tan importante como estos premios es un marrón considerable y que en Ibiza y Formentera podemos presumir de buena gente que se merece un premio. Enhorabuena a todos. Y larga vida a los premios Onda Cero Ibiza y Formentera.
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