Al escribir estas líneas no dejan de asaltarme pensamientos y sobre todo sentimientos en torno al Club Náutico Ibiza, nuestro estimado club. Una nave que durante estos últimos años he tenido el honor de timonear con pulso firme y objetivos claros, marcados por un puente de mando bien armado, que ha puesto todas sus fuerzas y todo su empeño al servicio de la entidad, contra viento y marea, atravesando una persistente tormenta con conatos de tifón que quiere borrarnos del mapa.
Contamos con una extensa masa social, sólida y comprometida, que nos apoya y con el soporte de prácticamente todas las entidades y asociaciones civiles, empresariales, sociales, deportivas, partidos políticos, parlamentos autonómico y central, además de los alcaldes y las respectivas corporaciones municipales de toda la isla, el Presidente y todo el pleno del Consell Insular d’Eivissa, del Govern Balear y de las asociaciones de clubs náuticos de Baleares y nacionales, con apoyo unánime de todos los clubes náuticos de todo el territorio nacional. Así nos lo han mostrado y demostrado a lo largo de casi cien años.

Y si esto es así, os preguntareis ¿Cómo puede ser que estemos ante esta situación? ¿Porqué los cuatro puertos dependientes del Estado, de la Autoridad Portuaria de Baleares, estamos contra las cuerdas, con autorizaciones temporales que debemos renovar año a año, con el consiguiente desgaste económico y psicológico?

Llevamos más de veinte años de precariedad mientras la Autoridad Portuaria habla de sostenibilidad. ¿Cómo puedes hacer un proyecto sostenible a un año vista?, ¿cómo puedes dotar al club de las inversiones necesarias sin tener trazas de futuro?
El propio Plan Especial del Puerto de Eivissa, en fase de exposición pública, reconoce por primera vez el uso de la dársena que ocupa el Club Náutico Ibiza como «marina social», no como «marina recreativa» como lo hacía hasta ahora.

La voluntad de los ibicencos es clara, diáfana, lo que quieren, lo que sienten, lo que exigen de sus representantes y de las administraciones competentes y responsables: UN ESPACIO PARA LA MARINA SOCIAL Y PROMOCIÓN DEPORTIVA EN EL PUERTO DE EIVISSA, para seguir con un trabajo, una labor, que ninguna otra entidad o institución realiza en nuestra ciudad.
Somos un polideportivo en el mar, la escuela municipal de vela de Eivissa, todo ello sufragado por los socios del Club y alguna pequeña subvención. Más de un tercio de nuestro presupuesto va destinado a la promoción deportiva, proyectos inclusivos y sociales. Es nuestro precepto, nuestra misión.
Señor presidente de la Autoridad Portuaria, miembros del Consejo de Administración de Puertos, en sus manos está la responsabilidad, creemos que las razones están más que argumentadas, explicadas, profusamente difundidas y documentadas.
Les toca cumplir con su deber, hagan su trabajo.
LLARGA VIDA AL CLUB! SALVEM ES CLUB!