Al margen de sus exigencias económicas, el presidente del Consell de Formentera, Llorenç Córdoba, ha demostrado sobradamente que no puede gobernar. Además de no tener los apoyos de su propio grupo político, un hecho que ya de por sí debería haber provocado su dimisión, Llorenç Córdoba no respeta ni los acuerdos de la Junta de Gobierno, como ha ocurrido con el tema de los chiringuitos de playa. Hasta la oposición, formada por el PSOE y Gent per Formenter, se han comenzado a hartar de la actitud de Llorenç Córdoba al frente del gobierno del Consell. La situación es insostenible y deben actuar ya.

Las FAPAS no deberían actuar como instrumentos políticos

La concejala de Educación de Sant Josep, María José Rios, ha lamentado la instrumentalización por parte de la Federació d’Associació de Famílies d’Alumnes d’Eivissa (FAPA) de Ibiza en relación a la polémica sobre la eliminación del carril bici del pueblo de Sant Jordi, en Sant Josep. Al margen de este asunto en concreto, suele ser frecuente que algunos órganos vinculados al mundo educativo actúen desde posicionamientos más políticos y no educativos, lo que evidentemente desvirtúa su auténtica función como entidad. Y mucho menos actuar en contra del sentir general de los colegios que representan.