Unos 350 alumnos de secundaria de los centros de la isla de Ibiza podrán disfrutar de Ciència per Tothom de la mano de Francisca Molinos y de los universitarios que la acompañan. | Arguiñe Escandón

De la mano de Francisca Molinos, coordinadora de los programas DemoLab y DemoTec y profesora asociada del departamento de Física de la UIB, los alumnos de educación secundaria de Ibiza disfrutan estos días del proyecto Ciència per tothom, que se desarrolla en la sede ibicenca de la universidad balear y en la Feria Orienta-T, que organiza el Consell d’Eivisssa y que se celebrará en el Recinto Ferial hasta el viernes. Un programa cuyo objetivo es acercar a estos adolescentes una visión de la ciencia que rompa con la experiencia únicamente teórica que les proporciona el sistema educativo.

«Se trata de relacionar la teoría con la experimentación», explica Molinos, «y, de esa forma, los alumnos ven que es algo divertido». Algo que en el actual sistema educativo no perciben con facilidad. «Se trata de enseñarle que la ciencia es experimental, que es ver, tocar y calcular», añade la responsable del proyecto tras impartir la primera clase en la sede de la UIB. Junto a ella, se han desplazado hasta Ibiza alumnos de los grados de Física, Biología y Robótica, que se encargan de enseñar a los adolescentes unas nociones básicas de estas disciplinas. Uno de ellos es Miguel Argües, que cursa en estos momentos segundo de Biología y que tiene claro que quiere dedicarse en el futuro a la docencia. «Supe de este programa por una profesora de mi instituto», relata, «y, aunque tenga que hacer sacrificios a la hora de estudiar, es algo que me compensa porque aprendo a explicar y a tratar con los alumnos». Para este joven, la experiencia con sus profesores tanto en la educación primaria y secundaria como en el Bachillerato fue fundamental a la hora de escoger una carrera científica: «Yo estudio Biología por los profesores que he tenido. En primaria tuve una profesora que me hizo ver que la biología era muy interesante y en las otras etapas he tenido profesores que querían que aprendiera pero también que entendiera y que tenían claro que lo importante no era solo sacar buenas notas».

Carreras «más atractivas»

Para Francisca Molinos, programas como el de Ciència per Tothom son fundamentales a la hora de conseguir que los adolescentes vean las carreras de ciencias y tecnológicas «más atractivas». Constata por su experiencia que «cada vez es más difícil atraer a los chavales al estudio porque, en secundaria, tienen cada vez menos curiosidad». «Es una etapa durísima para captar su interés», afirma. Y por ello le resulta gratificante verlos participar en este programa en el que reciben información práctica sobre Física, Biología y Robótica. «Es un programa muy práctico», explica, «y ellos pueden ver la ciencia y la tecnología de una forma muy divertida porque experimentan directamente con ella». En su opinión, el sistema educativo debería contemplar «una visión más práctica de la ciencia y de la tecnología» en la etapa de secundaria y esto ayudaría a que los adolescentes quisieran estudiar estas carreras universitarias. Sin embargo, reconoce que «es muy costoso» en términos económicos y que, a la vez, para el profesorado «es complicado» organizarlo debido a que en las aulas «hay unas ratios muy grandes que dificultan el poder experimentar».

Hasta mañana viernes, unos 350 alumnos de secundaria de los centros de la isla de Ibiza podrán disfrutar de Ciència per Tothom de la mano de Francisca Molinos y de los universitarios que la acompañan. En Física, conocerán el plano inclinado mientras que en el área de Biología se acercarán a las principales características de la Drosophila Melanogaster. En lo que a la robótica se refiere, finalmente, se introducirán en este mundo gracias a Lego y conocerán las bases de la programación y «las implicaciones de programar un robot que interactúa con el entorno físico mediante sensores y actuadores».