El jueves 11 de mayo de 2023 tuvo lugar, en los cines Capitol de Madrid, la gala de entrega de la tercera edición de los premios del festival de cortos Hygeia, presentada por la actriz Tete Delgado.

Este festival tiene un alcance nacional y se ha consagrado como una cita ineludible para los amantes de la cultura, el cine, la enfermería y la fisioterapia. Este año, se ha prácticamente duplicado el número de candidaturas respecto a las presentadas en el año 2022. Las propuestas llenas de calidad y originalidad son miradas únicas que han llegado desde 10 Comunidades Autónomas diferentes y hasta desde el otro lado del Atlántico, poniendo en valor el compromiso de las enfermeras y fisioterapeutas con su profesión.

Las cuatro categorías de concurso han sido: Corto Amateur, Corto Pro, Documental y mejor guion.

La mención especial del jurado para el corto ibicenco ‘El sentido’, tal y como expresó durante la gala Carlos Fernández, jurado del festival, crítico de cine y editor de la publicación ‘bandeja de plata’, se hace por unanimidad del jurado dadas las cualidades especiales que presenta la obra: centrarse en la poco conocida enfermería en Centros Penitenciarios, por hablar de la población reclusa, a menudo marginada, y poner de manifiesto cómo la enfermería y los cuidados humanizan el trato a estas personas, explicándolo a través de los cinco sentidos del ser humano.

Este premio fue recogido por la directora y realizadora del corto Cristina Martínez que ha estado acompañada de Notko, nombre artístico del autor de la música, también funcionario del Centro Penitenciario de Ibiza.

En su discurso de agradecimiento Cristina Martínez explicó que: «Quiero aprovechar para dar visibilidad y reivindicar la importancia de la labor que realizamos en nuestros centros penitenciarios. No solo enfermería, como muestra -el sentido-, también lo funcionarios de vigilancia y el resto de profesionales que trabajamos en prisiones. Alguien, de quien aprendo cada día, me ha enseñado que ser funcionaria del Estado significa estar al servicio de la ciudadanía, trabajar para tener una sociedad más justa, un país mejor. Esto es lo que nosotros, desde la sombra, intentamos cada día mediante la reeducación y la reinserción social de las personas privadas de libertad. Quiero dar las gracias a mi compañero Sergio. Por acompañarme en este proyecto con su música, que aporta tanto, y por ser tan buen funcionario. Es un placer trabajar contigo. Y mi mención especial es para Carlota y Manuela, mis hijas, por acompañarme siempre en mis locuras y porque los cuentos con los que habéis crecido han sido historias de la cárcel. Historias a veces tristes, a veces duras, pero siempre historias humanas con las que juntas hemos aprendido. Por eso, vosotras también sois el sentido.»