Momento del homenaje | ARGUI ESCANDON

La Plaça Nova de Santa Gertrudis cuenta desde este viernes por la tarde con una nueva escultura. Se trata de un busto del escultor William Fulljames, residente en la población durante décadas y que falleció en 2020. La efigie, realizada en bronce, se ha instalado después de que amigos del artista realizaran una recogida de firmas y la familia se ofreciera a realizar la imagen para su ubicación en un espacio público de Fruitera. De esta forma se mantiene el recuerdo de un personaje muy conocido en la población y cuya actividad artística en la isla fue intensa y muy ligada a diferentes colectivos.

La alcaldesa de Santa Eulària, Carmen Ferrer, y las hijas del fallecido han sido los encargados de descubrir la pieza, de bronce y unos 40 centímetros de altura. En su intervención, Ferrer ha destacado «la creatividad y la pasión de Fulljames, así como su humanidad, que le permitió hacerse con tantos y tan buenos amigos que ahora han contribuido a rendirle este homenaje».
William Fullames nació en Portsmouth (Reino Unido) el 3 de enero 1939. Allí hizo la carrera de diseño, escultura y talla en la Escuela de Arte y después en la Universidad de Gales, en Swansea. Tras acabar sus estudios, se dedicó a viajar por toda Europa con su primera esposa, la también artista Penélope Fulljames, y su hija Pepita en un autobús que servía de vivienda y de galería de arte itinerante.

En 1971, tras recorrer Grecia, Turquía y la costa española, la familia Fulljames decidió instalarse en Ibiza. Ya en la isla, donde nació su segunda hija, Mischa, montó un taller donde pudo dar rienda suelta a su pasión: el grabado en madera -estudió grabado en la Schinitzschule de Berchtesgaden (Alemania)- y la escultura. Participó en decenas de exposiciones individuales y colectivas. Entre ellas destacan las de la desaparecida galería Es Molí de Santa Gertrudis.
Era un participante asiduo de las Noches del Arte de Las Dalias y de la Ruta del Arte de la asociación Art Club Ibiza, donde recibía a los aficionados en el taller que construyó en la década de los años 80 del siglo XX cerca de Santa Gertrudis, en un jardín poblado de esculturas. En sus obras, en ocasiones de grandes dimensiones, casi siempre estaban presentes figuras humanas o de animales y destacaban por sus líneas suaves y puras.

También expuso con regularidad en la Society of Wood Engravers de Inglaterra, de la cual era socio y para la que ilustró numerosos libros. Fue profesor de la escuela internacional Felicity’s School, que se transformó después en el Morna Valley School.
«Bill Fulljames era un artista muy querido en el mundo del arte en Ibiza, donde era conocido por su carácter sencillo y afable. También le apasionaba la música Blues y Jazz y participaba en ‘Jam sessions’ de manera regular. Era un enamorado de una isla que descubrió de adolescente y de la que, una vez instalado, nunca se quiso marchar, hasta su fallecimiento el 9 de abril de 2020», resaltaron desde la Villa del Río.