Los ‘Almendros’ de Li Ramet, en el centro social de Corona | Toni Planells

El centro social de Santa Agnès puso de largo este sábado la instalación de la artista argentina afincada en Ibiza desde hace 18 años Li Ramet. «Se trata de una investigación sobre la vida rudimentaria y la necesidad de supervivencia de lo rústico y rural, a la vez que una pregunta hacia lo metafísico y lo inconmensurable más allá de las necesidades básicas», argumentó la artista contemporánea respecto a su instalación. En cuanto a la inspiración, Ramet explicó que «me fijé en la tierra de Ibiza, en el nacimiento y crecimiento de la flor del almendro y en lo rápido que desaparece arrastrada por el viento».

En este sentido, la artista subrayó que «Santa Agnès es el lugar ideal para esta instalación que he hecho expresamente, llevo muchos años viniendo a Corona a observar el proceso de la flor del almendro, por eso es algo especial para mí presentar aquí mi proyecto».

La instalación de Li Ramet consiste en una serie de troncos cubiertos por una gran sábana que conviven, unidos por cuerdas con otras pequeñas ramas de las que penden algunas almendras y con una colección de fotografías Polaroid de flores de almendro colgadas en la pared. «La sábana que uso ya formó parte de una performance que hice en Santa Anès hace unos años y forma parte de mi biografía artística», explicó Ramet, quien argumentó el elemento de las almendras atadas como «la representación de la semilla, en lo que se convierte la flor cuando desaparece para volver a dar la vida».

«Los troncos y ramas que uso los voy recopilando cuando hago mis caminatas por el campo», comenta la artista para argumentar que «no se trata solo de un trabajo de investigación y observación sino que también es un trabajo autobiográfico y un homenaje a la isla».

La artista no deja de observar que «este año estamos pasando hasta calor cuando en las mismas fechas; cuando hacía la investigación te pelabas de frío». Una preocupación que Li Ramet también transmite en su obra «reivindicando la supervivencia de lo rústico y conservar la esencialidad».