La candidata a la alcaldía de Vila, Virginia Mari, tuvo ayer en su acto de campaña el apoyo de el ex presidente del Govern balear Gabriel Cañellas y el de su padre y expresidente del Consell d’Eivissa, Antonio Marí Calbet, además el diputado Enrique Fajarnés acudió también a la cita en el parque del barrio de Es Pratet donde celebraron una comida.

Marí Calbet alabó a Cañellas y agradeció su presencia: «El presidente está aquí porque nosotros lo queremos mucho y estamos muy contentos, ha hecho mucho por Eivissa. Durante mi presidencia él me dio todo lo que le pedí, y por eso está con nosotros, quizás a alguien le da rabia, ¡pero que reviente!», exclamó.

Por su parte el Gabriel Cañellas explicó que su presencia en este acto fue debida a dos cosas: «la primera es que no hay voces suficientes para decir que si las izquierdas suben al gobierno desperdiciaremos cuatro años de duro trabajo, no queremos otra vez un gobierno de izquierdas porque tiraríamos toda la legislatura de trabajo a la calle. Y en segundo lugar he venido a apoyar la candidatura de Virginia Marí», afirmó y continuó: «Sus manos son muy parecidas a otras que yo me sé, tan fuertes como para parar una situación difícil que había en el Ayuntamiento y dotadas de una sensibilidad especial para reconducir una situación y tratar a la gente», alabó el expresidente. «Con estas manos, el Ayuntamiento de Vila volverá a ser lo que le corresponde ser», aseguró.

Tras estas palabra Virgina Marí agradeció la presencia de Cañellas y de su padre «por el apoyo y el esfuerzo que han hecho para venir y apoyarme, espero que con el equipo que tenemos y la confianza de la gente podamos gobernar cuatro años más», señaló.