El puerto de Formentera se cerró ayer durante una hora.

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) decretó alertas por temporal en las Pitiusas el pasado domingo, que se mantienen activas hasta hoy. Los usuarios de las barcas que cruzan muy a menudo entre ambas islas están muy acostumbrados a que esta situación se repita varias veces al año y «capean el temporal» como buenamente pueden. Varios centenares de ibicencos cruzan cada día a Formentera para trabajar y viceversa y estos cierres tienen sus lógicas consecuencias, dependiendo de cada caso. En esta ocasión la borrasca ‘Gloria’ ha provocado el cierre una tarde de domingo y una hora durante la mañana del martes. En esta ocasión no ha resultado grave para los suministros, ya que los camiones de transporte se han ido re-ubicando, pero se abre el debate de qué pasaría si llegase un temporal más violento y de mayor duración.

El capitán de Marina Mercante jubilado, Joan Torres lo tiene muy claro: «En la decisión de cerrar el puerto se deben aplicar criterios profesionales y no únicamente un protocolo que determine el cierre a partir de determinada intensidad del viento». Torres ha pasado más de 20 años a bordo de embarcaciones que unen las Pitiusas y defiende que el Puerto de La Savina, mueve dos millones de personas al año y en 2018 una cifra de negocio de 2,6 millones de euros. Con esas cifras, la instalación portuaria «merece una gestión profesionalizada». La Savina tiene un plan de cierre de puerto, como en todos los puertos, pero en su caso lo aplica un celador. A diferencia del puerto de Ibiza, donde el cierre lo decide un práctico «que es un profesional, capitán de la Marina Mercante».

Ni todos los barcos, ni todos los vientos son iguales. Por eso, Joan Torres insiste en que APB debe tomar en serio su instalación en Formentera. «Con la figura de un práctico y un remolcador de asistencia a las maniobras, se evitarían casi todos los cierres». Parece necesario que todos los estamentos implicados: (APB, Capitanía Marítima, navieras y el propio Consell de Formentera), tomen cartas en el asunto, aunque como dice Torres: «Solo nos quejamos cuando nos afecta y el temporal pasará».