Imagen del Ayuntamiento de Formentera.

El Consell de Formentera ha suspendido el inicio de procedimientos de recaudación en plazo voluntario de deudas, mientras dure el estado de alarma.

La presidenta del Consell de Formentera, Alejandra Ferrer, ha firmado este miércoles un primer decreto de medidas económicas y tributarias para afrontar el impacto de la crisis del coronavirus.

Según ha declarado, la situación «requiere de la rápida reacción por parte de las administraciones públicas, así como una respuesta conjunta y una política coordinada de actuación para afrontar con las máximas garantías los efectos provocados por el brote de este virus».

Desde la institución también han detallado que se suspenderá la emisión de notificaciones en materia de ingresos de derecho público; la aprobación de padrones y listas de cobros de tasas y precios públicos con periodicidad mensual, así como la remisión a la Agencia Tributaria de Baleares de los ingresos de derecho público no pagados al Consell en el plazo voluntario para que se inicie el procedimiento ejecutivo de recaudación.

Asimismo, el Consell pedirá a la ATIB la ampliación del plazo voluntario del pago de tributos de cobro periódico por recibo, previsto inicialmente para agosto y octubre y que incluye el Impuesto de bienes inmuebles o de actividades económicas, entre otros.

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IMPULSO A LA ATENCIÓN A FAMILIAS
El Consell ha anunciado que priorizará el pago de los expedientes en materia de bienestar social y la atención a familias, así como el abono de facturas a los proveedores del Consell.
Ferrer ha recordado que quieren prestar atención a las personas y familias «más vulnerables, que en estos momentos son quienes quedan en una situación muy complicada».

La institución modificará además, si es necesario, las ordenanzas fiscales y precios públicos para mitigar el impacto de la crisis sanitaria entre el tejido económico, social y productivo de Formentera.

La presidenta ha explicado que se trata de un «primer decreto al que seguirán otros más específicos y adaptados a las circunstancias», añadiendo que en estos momentos «resulta obligada la adopción de medidas extraordinarias en el ámbito de aplicación de los tributos».

La prioridad, según ha dicho, es «aligerar el impacto fiscal de familias y empresarios, facilitando con ello que la normalidad se recupere tan pronto como la situación sanitaria mejore».

Ferrer ha añadido que, debido a la situación, se propone un primer paquete de medidas económicas, «fruto del contacto continuo entre los servicios económicos del Consell y el resto de áreas, así como los agentes económicos y empresariales de la Isla para que sean lo más eficiente y eficaces posibles y se adapten a la realidad y al tejido económico de Formentera».