Cuarenta representantes del sector turístico se reunieron ayer para atajar el problema del turismo juvenil. Foto: GERMÁN G. LAMA.

Representantes de todo el sector turístico de Sant Antoni y de Sant Josep mantuvieron ayer una reunión que fue calificada de «histórica» por algunos de los asistentes. Por primera vez, ayuntamientos, turoperadores, hoteleros, bares, restaurantes y discotecas se han sentado para atajar los problemas derivados de un cierto turismo juvenil. Al término de la reunión, el alcalde de Sant Antoni, Antoni Marí Tur, señaló que «esta misma noche entran en vigor las medidas que se están tomando para mejorar el turismo». El alcalde destacó la «buena predisposición» de los turoperadores y reconoció que había sido «muy duro al pedirles responsabilidades a ellos», remarcando que «por primera vez, todo el mundo habla el mismo idioma».

También optimista se mostró el concejal de Gobernación de Sant Josep, Antoni Cardona Pujolet, quien explicó que el principal problema en su municipio son las «beachparties» (fiestas en la playa), que se dan tanto de día como de noche «perturbando a la gente con estas llegadas masivas de gente que está de juerga». El concejal ha conseguido el compromiso de turoperadores para evitar estas situaciones. Desde los turoperadores, John Davis, responsable de Club 18/30 y una veintena más de agencias, remarcó que «la gente que viene a Eivissa ya no quiere pubcrawls, sino que está cambiando el tipo de turista» y se mostró «más decidido que nadie a cambiar la imagen de la isla».