CONCHA ALCANTARA El padre de un enfermo mental que fue diagnosticado hace cino años como esquizofrénico paranoico ha presentado una denuncia ante la Fiscalía de Eivissa por un delito de discriminación ante la falta de recursos sociosanitarios para atender a un colectivo de 500 personas que sufren trastornos mentales en la isla. El afectado responsabiliza al Insalud, el Servei Balear de Salut (Serbasa) de la Conselleria de Sanitat del Govern y el Consell Insular d'Eivissa i Formentera de esta situación. También cree que las instituciones sanitarias son responsables de un delito de omisión.

El empeño de este padre, que ha erigido como portavoz al psicólogo David Corral, se centra en «poder conseguir que se implanten en Eivissa los recursos sociosanitarios para los enfermos mentales y puedan recibir una digna asistencia integral rehabilitadora de carácter sanitario».

En el escrito de denuncia se recoge que en Eivissa se sufre una clara discriminación y que los daños originados por este hecho «causan un grave y continuado detrimento y perjuicio de la integridad psíquica de los afectados».

De este modo menciona el suicidio de una persona, agresiones dentro del ámbito familiar y el caso concreto de un vecino de Eivissa, tutelado por el Consell Insular y con atención sanitaria del hospital Psiquiátrico de Palma, que está pendiente de juicio por un supuesto robo y anteriormente condenado por agresión, «que se encuentra en situación de desaparecido desde hace más de cuatro meses». También expone su propia situación personal, ya que su hijo ha decidido marcharse de Eivissa «por no poder encontrar una solución a su angustia, ni lograr un consuelo que le proporcione una tranquilidad y felicidad».