GUILLERMO ROMANÍ Margalida Rosselló, consellera de Medi Ambient del Govern balear, señaló durante la visita que anteayer realizó a Formentera que tanto el Ayuntamiento, como el Consell y el propio Govern deberán decidir qué «medidas cautelares han de tomarse hasta que se haya redactado el Plan Territorial de Eivissa y el de Formentera y se hayan revisado las Directrices de Ordenación del Territorio y la Ley del Suelo Rústico». Rosselló explicó al término de una reunión con representantes municipales que los espacios naturales y su posible degradación preocupan mucho a los miembros del Consistorio, por lo que considera necesario tomar una serie de medidas transitorias que protejan estas zonas hasta que se hayan aprobado normativas definitivas al respecto.

Por lo que se refiere a la Reserva Natural de ses Salines, la consellera afirmó haber quedado «profundamente impactada por ver como está sometida a una presión turística tan enorme debido a la cantidad de gente, de coches y de motos que hay cada día y a todas horas». Tanto es así, que Margalida Rosselló opina que hay que «revisar el uso de la zona y regularlo, especialmente por lo que se refiere a la superpoblación de motos». La consellera lamentó que la mayoría de los visitantes desconozcan el valor del lugar.