Las bajísimas temperaturas que sufrieron ayer las Pitiüses no restaron ni un ápice de animación a las fiestas de la localidad de Santa Gertrudis "en el término municipal de Santa Eulària", que ayer celebró su día grande con un rotundo éxito de participación.

Los actos comenzaron bien temprano, a las ocho de la mañana, cuando las campanas de la bella iglesia del siglo XVIII de esta localidad comenzaron a repicar hasta que todos o casi todos los vecinos del pueblo se levantaron para sumarse a la fiesta.

A las doce del mediodía, el obispo de la diócesis de Eivissa y Formentera, Agustín Cortés Soriano, ofició una misa solemne. Al acto religioso asistieron, entre otras autoridades, el alcalde de Santa Eulària, Vicent Guasch, acompañado del resto de la corporación municipal; la consellera de Cultura del Consell Insular d'Eivissa i Formentera, Fanny Tur; el director insular de la Administración del Estado, Luis Carlos Fernández Tejerina; el comisario jefe del Cuerpo Nacional de Policía, Angel Marí; y el presidente del Partido Popular pitiuso, Josep Juan Cardona.

Durante el oficio religioso se oyó la música que tocaron los integrantes de sa Colla de Santa Gertrudis. Una vez acabada la misa, los casi 200 feligreses que llenaban el templo se colocaron en fila para participar en la procesión por los alrededores de la iglesia, que encabezó el alcalde y la consellera de Cultura. Los jóvenes de la localidad cargaron a sus hombros las cuatro imágenes que alberga la iglesia. Una vez acabado el paseo, y devueltas las tallas a sus sitios, llegó la hora del ball pagès.