La moratoria sobre campos de golf en las Pitiüses centró el debate parlamentario celebrado ayer en la Cámara autonómica.

El Parlament balear aprobó ayer la toma en consideración de una proposición de ley de moratoria de construcción de campos de golf en las Pitiüses. La iniciativa, presentada por el Consell Insular d'Eivissa i Formentera, se aprobó con los votos favorables del PSOE, PSM, Esquerra Unida-Verds y el grupo Mixto y con la oposición del Partido Popular. En la proposición se establece la suspensión de la ley de campos de golf hasta que no entre en vigor el Plan Territorial Parcial (PTP) de Eivissa y Formentera. Al mismo tiempo, según explicó el conseller insular de Medi Ambient, Joan Buades, se recoge la paralización de la declaración de interés general para futuros proyectos de campos de golf. Buades, aseguró que la normativa, por primera vez, «contempla la discriminación positiva de las Pitiüses, después de ver cómo el Parlament aprobó la reforma parcial de la Ley de Espacios Naturales (LEN)». El conseller destacó que la propuesta del Consell se debatirá en la comisión parlamentaria de Ordenación del Territorio para su posterior aprobación en pleno, el próximo mes de enero. Buades recordó que el PP «se comprometió a comprar a la promotora los terrenos para protegerlos» y en este sentido destacó que las posibles indemnizaciones que podría recibir la promotora del golf se basarán en el valor del proyecto y la licencia otorgada por el Ayuntamiento de Sant Josep. «Con la legislación en la mano, la promotora recibiría poco dinero», sentenció Buades. El conseller de Medi Ambient destacó que el objetivo final de la moratoria es «lograr un equilibrio entre el desarrollo económico y turístico y la sostenibilidad ambiental».