Tanto Comisiones Obreras como el Sindicat de Treballadors de L'Ensenyament de les Illes (STEI) lamentaron ayer las obras inacabadas en el comienzo del curso y las ratios altas por aula para acoger a los alumnos de infantil. No obstante, coincidieron ambos en destacar que este comienzo del curso ha sido recibido con normalidad en los colegios públicos, ya que alrededor del 90 por ciento del profesorado estaba en su lugar de destino desde principios de septiembre.

El delegado sindical de enseñanza en CC OO, Antonio Cicerol, señaló ayer que «los profesores de los centros están mucho más contentos porque no se ha registrado el caos del curso anterior, ya que las plantillas están completas». Sin embargo, acusó a la Conselleria d'Educació de «falta de previsión» al no responder al aumento de la demanda escolar, que ha supuesto una subida de la ratio de alumnos de infantil por aula.

Los representantes de los sindicatos destacaron, además, que «todavía quedan obras pendientes de finalizar en centros de primaria», indicó Torres. Por su parte, Cicerol responsabilizó a los ayuntamientos de las obras pendientes, «porque se les ocurre realizar obras en los centros coincidiendo con la entrada de los niños».

Pese a que la plantilla de los profesores está prácticamente completa, el portavoz de CC OO recordó que hay plazas sin cubrir en los colegios donde se sigue impartiendo la ESO, sobre todo de catalán y audición y lenguaje. Cicerol pidió que se tenga en cuenta la situación de las Pitiüses: «Que se contemplen nuevas instalaciones, dotaciones adecuadas, escolarización del alumnado con necesidades educativas especiales y profesores para el tratamiento de la diversidad».

Por su parte, la vicepresidenta de la FAPA, Isabel Delgado, hizo una valoración positiva de este comienzo del curso, pero precisó que «algunas de las obras de los colegios no están terminadas».