Numerosos devotos del Santo Cristo del Cementerio de Eivissa acudieron a la cita anual con el santo para participar en el novenario iniciado ayer y que se prolongará hasta el próximo domingo 1 de octubre.

El acto incluyó el rezo del rosario, las plegarias de alabanza, una misa y la predicación del párroco de la iglesia de Santo Domingo, Juan Ribas Vich, y el orador sagrado Sergio Requena Hurtado, que participarán en los actos religiosos a lo largo de estos nueve días. El horario de las novenas, unas de las de mayor tradición y arraigo entre los ibicencos, es de 19'30 horas todos los días.

La historia de estas jornadas de oración y reflexión con tanto arraigo entre la población se remonta 135 años atrás, justo después de que Eivissa superase una grave y mortal epidemia de cólera boboasiática en la que fallecieron alrededor de 5.000 personas en toda la isla.

Fue entonces, una vez superada la enfermedad, cuando un nutrido grupo de creyentes decidió dar gracias por su salvación con una advocación. Desde entonces y tan sólo con la irrupción de tres años provocada por la Guerra Civil, la iglesia de Santo Domingo acoge cada año este novenario que cuenta con un gran número de seguidores, la mayoría de ellos adscritos a la cofradía que lleva su nombre.