La jardinería y los ornamentos florales son una parte esencial dentro del paisajismo de una ciudad. En la actualidad, bien se podría adaptar el dicho popular y decir «dime como son los jardines de tú ciudad y te diré qué nivel de vida tiene». Para Juan José Forner, técnico municipal de Parques y Jardines en el Ayuntamiento de Eivissa, éste es un hecho más que claro: «Cada vez más, la gente mira el nivel de desarrollo con cosas menos materiales que antes y valora las ciudades humanas y agradables en las que abunden los espacios verdes y libres», algo que desafortunadamente escasea en Eivissa.
En la actualidad, el municipio cuenta con 140.000 metros cuadrados de zona ajardinada, lo que supone una media de alrededor de 4'5 metros cuadrados de zona verde por habitante, un índice que representa menos de la mitad del estándar mínimo establecido, de 10 metros cuadrados por persona, y que en ciudades como Sevilla se aspira a alcanzar el ideal de 20. El Passeig Maritim Joan Carles I, con 12.000 metros cuadrados, es la superficie más extensa en Eivissa y tampoco cumple los parámetros de cercanía al domicilio que establecen que los paseos y parques deben estar a 500 metros del lugar de residencia del ciudadano.
Mientras los proyectos de mejora y creación de nuevos espacios verdes como el de ses Feixes cuajan y toman forma, la concejalía de Ciudad Sostenible, a través del departamento de Parques y Jardines, trabaja para que las pocas zonas verdes de la ciudad estén lo más acogedoras posible. A lo largo de esta última semana la brigada de jardineros del Ayuntamiento de Eivissa, formada por 17 operarios, se ha ocupado de plantar 3.500 pensamientos en distintos puntos de la ciudad como el Passeig Vara de Rey, el Parc de la Pau, o la fuente de Isidor Macabich, entre otros, dando un toque de color y embelleciendo el entorno.
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