Todos los grupos políticos del Consell Insular reconocieron durante la sesión plenaria que se celebró ayer la necesidad de prestar más colaboración a los ayuntamientos y, en la medida de lo posible, de incrementar las ayudas económicas para que éstos puedan hacer frente a las muchas necesidades que tienen. El grupo popular y el grupo mixto emplazaron al equipo de gobierno de la institución a incrementar la cantidad destinada a la cooperación municipal, aunque el conseller responsable de esta área, Vicent Tur, señaló que algunas de las vías de colaboración que se han intentado instrumentar no han salido de momento adelante porque no se ha logrado la cooperación de algunos ayuntamientos gobernados por el Partido Popular.

El debate se entabló con motivo de la aprobación inicial del Plan Insular de Obras y Servicios (PIOS), al que el Consell destinará este año 500 millones de pesetas, la misma cantidad que en el ejercicio anterior aunque entonces se había visto incrementada en 80 millones. Tanto para el conseller del PP, Pere Palau, como para el conseller del grupo mixto, Joan Buades, la cantidad debería ser mejorada.

Palau, cuyo grupo se abstuvo en la posterior votación, consideró que el plan está «mal dotado» y reiteró que la cantidad económica no ha evolucionado en el último año como lo ha hecho el presupuesto de la institución insular. Por su parte, Buades, que optó por abstenerse, consideró necesario establecer un plan de acción local a largo plazo y una serie de mecanismos de evaluación de los resultados.

Tur desmintió las afirmaciones de Palau de que el PIOS es la única colaboración que el Consell presta a las entidades locales. El conseller recordó que la institución no tiene ingresos propios y que su presupuesto está muy limitado en función de las competencias que asume, pese a lo cual este año ésta construirá el centro de recuperación de animales y mejorará las instalaciones del matadero. Además, participará económicamente en la gestión de ambas infraestructuras siempre y cuando los ayuntamientos den su visto bueno a la creación de un consorcio que mancomune estos servicios.