Los padres fueron conminados a aportar alimentos de distintas procedencias para que los alumnos los conocieran. Foto: K.T.

Comiendo se entiende y conoce la gente». Éste podría ser el eslogan que resumiese el espíritu con el que la dirección y profesorado del colegio Poeta Villangómez de Cas Serres celebró ayer la fiesta multicultural con la que cerró la Semana de la Paz y Convivencia.

«Cambiamos la celebración del Día de la Paz por la Semana Multicultural con la idea de acercarnos y conocernos más y mejor tanto la comunidad educativa como la de los padres», señaló Adela Pueyo, director del centro. Para ello la convocatoria invitó a padres, profesores y alumnos a que desde las 12'30 horas de la mañana acudieron al patio del colegio con los platos típicos de cada región, en el caso de España, o país, en el caso de los alumnos y familias de origen extranjero.

«La verdad es que ha sido un éxito porque se ha juntado una gran cantidad de comida y gente», comentó Adela Pueyo, quien señaló la importancia de la celebración tanto para los niños como para los adultos, a quien se les invitó a intercambiar alimentos e impresiones acerca de las costumbres y recetas de cada lugar de origen. «Me ha parecido una fiesta preciosa», decía Cristina, una madre valenciana que había preparado unos pasteles de boniato. Esta misma opinión la compartían Àngeles y Paquita, a las que les sorprendieron las especialidades marroquíes.

Sin duda fueron los platos típicos de India, Marruecos, Ecuador y Colombia los que más llamaron la atención entre los comensales, que dieron buena cuenta de la gran cantidad de manjares de elaboración casera presentados para la ocasión. Una de las mesas más llenas y variadas fue la que estaba compuesta por los platos y productos andaluces, una comunidad con bastante presencia entre el alumnado al igual que la valenciana y la ibicenca.