La climatología no ha sido precisamente benévola con los primeros turistas de esta temporada.

La temporada turística se abre hoy oficialmente y con ella las puertas de más del 90 por ciento de los establecimientos hoteleros de Eivissa y Formentera, muchos de los cuales ya han trabajado durante el pasado fin de semana. Aún así, según explica el presidente de la Federación Empresarial Hotelera de las Pitiüses, Joan Bufí, algunos esperarán todavía a mediados de mes o a primeros de junio para dar el pistoletazo de salida. «No todos podemos trabajar durante seis meses», confirma Bufí.

El presidente de la patronal confió ayer en que la temporada 2001 sea buena, aunque quizá un poco por debajo de los resultados de los últimos dos años, que han sido considerados casi como excelentes por autoridades y empresarios. Sin embargo, la preocupación del sector no está tanto en la cifra de clientes, cuya masiva respuesta en julio y agosto se da prácticamente por segura, como en el clima de crispación que parece haberse instalado entre las instituciones gobernadas por el Pacte Progressista y los empresarios del sector turístico, especialmente los hoteleros.

Joan Bufí denunció ayer la «falta de respuesta» a problemas graves que sufren las Islas, entre los que citó la falta de infraestructuras adecuadas, el mal estado de las carreteras o la inseguridad sobre el abastecimiento de agua. En opinión del presidente de la patronal, se ha hablado tanto de medio ambiente «que se ha acabado por confundir el concepto» y lo que se defiende utilizando ese calificativo no siempre supone una solución a los problemas que tienen Eivissa y Formentera.