El sindicato USO de Eivissa ha vuelto a comprobar, según denuncian,
que el Consell no está demasiado dispuesto a darle peso decisorio
en los proyectos sociolaborales que se activan desde esta
institución. Tras los obstáculos para tomar parte en la mesa por la
ocupación, esta vez se trata del listado de las personas que podrán
ser vocales en el Fòrum de la Inmigració d'Eivissa i Formentera.
El texto de los estatutos dice textualmente que podrán tomar
parte «un representante de las organizaciones empresariales más
representativas del ámbito de las islas de Eivissa y Formentera y
un representante de los sindicatos más representativos del ámbito
de la Comunitat Autònoma», entre otros. Esta extraña diferencia
geográfica al elegir a los integrantes -que excluye a USO- y el
hecho de que no se les haya ido informado del proceso ha molestado
al sindicato.
Esta no es la única cláusula que deja a un lado a USO en el
foro. Esta mesa de debate puede contar con representación de cada
una de las ONG y entidades que acrediten documentalmente haber
desarrollado, al menos durante un año, proyectos dedicados al
colectivo de inmigrantes. USO cuenta con una organización en este
sentido desde hace meses pero no desde hace un año, como marca los
estatutos.
Antonio Llanos cree perjudicial que se actúe en este sentido
excluyente porque «estamos hablando de un foro de ayuda a la
integración del inmigrante en el que parece positivo que se aporten
el mayor número de ideas posible ». Llanos reconoce que una parte
de la ley sindical se traduce en que, con el peso actual de USO, no
puede ser sindicato más representativo, pero recuerda que la ley
asegura que la comunidad autónoma «puede determinar el nivel de
grado de representatividad» y reconocer así el grado de
implantación real.
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