Don Antoni Torres Ripoll ante la iglesia de Sant Miquel. Foto: MARGA FERRER.

Antoni Torres Ripoll, Toni de Can Lluquí de Sa Cova en Sant Joan, recibirá el próximo domingo un cariñoso homenaje de sus vecinos de Sant Miquel con los que ha convivido desde 1962. Este aniversario coincide con sus bodas de oro como sacerdote, trayectoria en la que también estuvo al frente de las parroquias de Santa Gertrudis y en Sant Mateu. Párroco por oposición, entre sus lecturas preferidas están los evangelios de San Juan.

"Cincuenta años al servicio de la Iglesia son muchos años. ¿Se le han pasado rápido?
"Se me ha hecho corto. Parece que fue el otro día cuando cantaba la primera misa...

"¿En qué año debutó?
"Fue en el año 1951 en Sant Joan. Tenía 27 años.

" Y al frente de la parroquia de Sant Miquel lleva cuarenta...
"No se han cumplido del todo, faltan tres meses. Antes de venir aquí estuve en Sa Cala, en Sant Vicent, fue en el 52.

"¿Ha notado muchos cambios desde sus comienzos hasta ahora?
"Los cambios que ha vivido la gente de mi edad. Yo soy de antes del Concilio y antes en la Iglesia había otra disciplina.

"¿Qué se ha modernizado, la Iglesia o los sacerdotes?
"Se han modernizado la Iglesia y los sacerdotes en el sentido de que estamos más cerca del pueblo. Un signo de esto es que vamos de paisano...

"¿Ha utilizado sotana?
"Sí, durante más de diez años, y era un poco incómoda.

"¿Cuántas misas cree usted que ha dicho en todo este tiempo?
"(Sonríe) He perdido la cuenta. Contando los días de los cincuenta años se podría sacar un promedio.

"Imagino que tendrá anécdotas para comentar...
"(Sonríe) Una cosa curiosa, no graciosa, es que coincidió que cuando yo estaba en Sant Vicent mi primer y último muerto cayeron dentro de la misma fosa. Llené todo el cementerio y el último muerto recibió sepultura en el mismo lugar que lo había hecho el primero. También coincidió que el primer y último bautizo eran dos hermanos.

"De no ser cura ¿Qué le gustaría haber sido?
"Médico, pero me pudo más la fe, que es una especie de ciencia.

"¿No es algo contradictorio?
"No. La fe es experimentar a Dios. El que tiene fe experimenta con Dios, lo que pasa es que una cosa es natural y la otra sobrenatural.