Marc Guarro Roca fue la primera persona que adquirió la serie Patrimonio Mundial de la Humanidad en la que figura Eivissa. Foto: V.F.

Cuando la declaración de Eivissa como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco está a punto de cumplir dos años, sus bienes siguen en boca de todos y, desde ayer, en las colecciones y correo de más de uno.

Ayer la oficina de Correos y Telégrafos acogió la presentación del matasellos y el sello de Eivissa Patrimonio de la Humanidad. Éste último forma parte de una serie formada por doce estampas con imágenes de ciudades y bienes españoles distinguidos por la Unesco en los últimos dos años de 40 pesetas (0'24 euros) cada uno con una imagen de Dalt Vila en la que se recoge una vista de la catedral. Esta imagen, titulada «Ibiza biodiversidad y cultura», comparte protagonismo junto a las murallas romanas de Lugo, la Universidad y recinto histórico de Alcalá de Henares, el arte rupestre del Arco Mediterráneo, el palmeral de Elche o los yacimientos prehistóricos de Atapuerca entre otras.

A primera hora de la tarde de ayer la sucursal de Correos montó una mesa especial en la que un funcionario se dedicó a vender y sellar las series enteras que los coleccionistas y curiosos adquirieron para tener de recuerdo.

El teniente de alcalde del Ayuntamiento de Eivissa, Pedro Campillo, y el concejal de Bienestar Social, Santiago Pizarro, en representación del Consistorio, fueron las únicas autoridades que estuvieron en el acto de presentación.

Marc Guarro Roca, un joven aficionado a la filatelia, fue el primero en adquirir la serie Patrimonio Mundial de la Humanidad con su correspondiente sobre de primer día de circulación por el módico precio de 480 pesetas (3'32 euros). «He comprado una serie con el matasellos y otra sin él porque tiene más valor», comentó.