Álvaro Jiménez con la camiseta de su ídolo. Foto: K.T.

Àlvaro Jiménez Villena tiene 7 años y es del Real Madrid, a pesar de que en su familia se rodea de muchos culés. Su ídolo es Raúl González Blanco, la estrella del equipo merengue. Padece el síndrome de Prader Willi por el que presenta una movilidad reducida crónica. Su madre es Carmen Villena, vicepresidenta de la Asociación de Personas con Necesidades Educativas Especiales de Eivissa i Formentera (Apneef), quien por un cuidador se enteró de la existencia de la Fundación Pequeño Deseo.

A través de esta organización Àlvaro pudo ver a su ídolo el pasado 3 de enero en Madrid. Recibió como recuerdo la camiseta con la que Raúl estrenó la equipación del centenario del club marcando un gol al Atlético de Madrid en la noche del día 2. Jesús Fermosel, presidente de la Fundación Pequeño Deseo, aseguró en un programa emitido recientemente por Antena 3 Televisión: «Intentamos cumplir lo que nos piden, aunque muchas veces piden curarse y eso es imposible». Asentada en Madrid, su fin persigue ayudar a sonreír a los pequeños que tienen enfermedades crónicas o que están en estado terminal cumpliendo los deseos que para ellos se presentan como algo inalcanzable.

Àlvaro viajó a la capital a primeros de año sin saber que se iba a encontrar con su ídolo futbolístico. «A estos niños, que muchas veces tienen la autoestima por los suelos, les puede cambiar la vida encontrarse con sus héroes. Aseguro que a mi hijo le cambió la cara nada más ver a Raúl, se puso muy contento». Cuando llegó el momento de la cita sorpresa Àlvaro no podía dar crédito y con toda la naturalidad del mundo se dirigió al jugador y le abrazó al grito de «te quiero». «Raúl se emocionó también, es una persona muy cálida, se le ve muy sensible, algo que demuestra con gestos que a estos niños les hacen sonreír de verdad», comenta Carmen Villena.

Después recibió la camiseta con la que había marcado la noche antes al 'Mono' Burgos -portero del Atlético de Madrid- el primer gol del año 2002, con la equipación del centenario y en el estadio Santiago Bernabéu. La estrella del Real Madrid la firmó con la siguiente leyenda: «Para mi amigo Àlvaro, un gran madridista. Con todo mi cariño, 03-01-02». Además le hizo entrega de una fotografía también dedicada y le comentó algunas de las jugadas que más le han gustado de su trayectoria. Un pequeño gran deseo que trajo a Eivissa la camiseta del 'crack'.