Este nuevo organismo está formado por 34 miembros que representan a las instituciones y al sector turístico.

El conseller de Turisme del Consell Insular, Josep Marí Ribas, dejó ayer claro en la reunión constitutiva del Consejo Asesor de Turismo (CAT) de Balears que las Pitiüses esperan que anualmente se destine a estas islas una cantidad similar a la recaudada a través de la ecotasa. Es decir, aunque es difícil cuadrar hasta el último céntimo las cantidades, como reconoció ayer Marí Ribas, se confía en que se aprueben proyectos por un importe similar al dinero que los turistas dejen en Eivissa y Formentera a través del impuesto sobre estancias en alojamientos turísticos. «Yo he dicho en la reunión que espero que se puedan equiparar de alguna manera los proyectos al número de turistas que tenemos, que exista cierta proporción», explicó el conseller.

El Consejo Asesor de Turismo es una entidad que ha sido remodelada con el fin de convertirla en el órgano encargado de supervisar y aprobar de manera definitiva los proyectos que se financiarán a través del fondo de rehabilitación de espacios turísticos, que se nutrirá fundamentalmente a través de la ecotasa. El CAT, en el que hay una treintena de miembros, incluidos representantes de los tres consells insulars, tendrá también una comisión estrictamente técnica -en la que el Consell también ha conseguido incluir a un representante-, que se encargará de revisar de manera inicial todos los proyectos que se reciban y de argumentar si cumplen o no los requisitos establecidos en la ley de la ecotasa, dado que el dinero recaudado no puede utilizarse para cualquier fin sino sólo para los especificados en la normativa.

Según Marí Ribas, hoy por hoy «no está nada decidido» en cuanto a las prioridades de inversión en las Pitiüses, aunque el Consell tiene claro que uno de los puntos de partida deben ser los planes de excelencia turística elaborados para distintos municipios. «Hay que revisar estos planes y ver cuáles de ellos cumplen los requisitos, porque las obras que sean estrictamente de carácter urbano pueden no cuadrar con la filosofía de la ecotasa», advirtió el conseller ante las muchas especulaciones que se están realizando en los últimos días sobre el destino final del dinero.

Ante la decisión de los hoteleros de las Islas de boicotear, en la medida de lo posible, la implantación de la ecotasa, Marí Ribas manifestó ayer que, en su opinión, «los empresarios no aciertan con esta postura, aunque son libres de establecer la estrategia empresarial que consideren más adecuada». «No comparto la decisión, pero no tengo nada que decir al respecto», añadió.